Hace 22 años, Venus Williams llegaba a Londres luego de cuatros meses sin competir debido a una lesión que la obligó a apartarse momentáneamente de las pistas. Días más tarde, la Catedral del Tenis atestiguaría la concreción de un sueño: la mayor de las Williams reinaba en Wimbledon, su Grand Slam predilecto. En el día de su cumpleaños, repasamos la primera de sus cinco victorias en el All England.
El Slam más anhelado
“Siempre soñé con ganar en el US Open, pero para Venus el sueño era Wimbledon… Cuando lo logré en [Nueva York] 1999, mi hermana me miraba con orgullo, pero en el año 2000 sería su turno”, decía Serena Williams en Dare to Dream, un documental que rememora la primera conquista de Venus en el Slam londinense.
La previa de su triunfo
Williams, de 20 años, llegaba al segundo Grand Slam de la temporada luego de cuatro meses sin competir debido a una tendinitis que había afectado a sus muñecas. Aquel año, antes de su participación en Wimbledon, sólo se había presentado en tres eventos: Hamburgo, Roma y París. Sin embargo, pese a la corta preparación sobre césped, Venus sabía que se acercaba su momento: “Recuerdo ingresar en el torneo diciéndome a mí misma ‘Voy a ganarlo. Es mi turno, de nadie más’. Fue la única vez que entré en un certamen de esa forma”, expresaba la ex Nro. 1 del mundo a la WTA.
Caer, aprender y levantarse
En 1997, Venus debutaba dentro del torneo británico con una derrota en primera ronda contra la polaca Magdalena Grzybowska. En los años siguientes, mejoró su marca y avanzó hasta los cuartos de final -en 1998 cayó frente a Jana Novotna y en 1999 versus Steffi Graf-. Así que, después de esas batallas, Williams sentía que “ya había pagado sus deudas” y podría buscar lo que tanto anhelaba: su primer título de Grand Slam.
En la edición entrante de Wimbledon, Venus se encargó de superar las primeras rondas de manera dominante. Pero en los cuartos de final se enfrentaría con una prueba de fuego: allí aguardaba Martina Hingis, cabeza de serie y múltiple campeona de Grand Slam. Luego de una batalla a tres sets, la estadounidense derribó la barrera de los cuartos para medirse con su hermana en busca del pase a la final.
Venus y Serena
En la previa de las semifinales, Venus era quien lideraba 3-1 el historial frente a su hermana. Antecedente que se incrementaría gracias a la victoria de la mayor de las Williams para acceder a su primera final en el All England. En la última instancia, esperaba la campeona defensora, Lindsay Davenport. Allí, Venus se impuso frente a su compatriota por 6-3; 7-5, adquiriendo el primero de sus cinco títulos en la Catedral del Tenis. Además del Slam individual, consiguió junto a su hermana el trofeo en dobles, derrotando a Julie Halard y Ai Sugiyama.