Holger Rune es tenista de tercera ronda en el Open de Australia al derrotar a Maxime Cressy en dos horas mediante un 7-5, 6-4, 6-4.
Siendo el primer Grand Slam donde Holger Rune se encuentra en ese papel de uno de los favoritos, superó sin problemas su primer partido y se citaba ante la incomodidad de un buen sacador como Maxime Cressy. Pese a la juventud del danés, ya sabían de antemano lo que era enfrentarse en dos ocasiones. Lo habían hecho en primer lugar en el Challenger de Pau a finales de 2021 y el pasado año en el Masters 1000 de Montecarlo. Los dos triunfos fueron para Holger que no cedió ningún set.
Rune entiende su papel
Tuvieron un inicio de encuentro bastante movidito. Cressy fue el primero en sorprender a Holger que tuvo una reacción inmediata. Los problemas con el servicio continuaron durante sus dos próximos turnos al saque, pero tras superar ese escollo y regresar a una aparente normalidad de ritmo, cabalgaron más relajados. El número 10 del mundo, en el undécimo juego no iba a dejar escapar ese 15-40 que le situaba por delante dejando atrás un peligroso tie-break. Lo confirmó, y seguidamente con ese 6-5 sirvió por el set sin ningún tipo de problema.
En el segundo parcial, con los dos ascendiendo su capacidad del primer golpe, Rune buscó y encontró en un juego donde Maxime no las tuvo todas consigo y ese 2-1 que se creó en el electrónico fue en blanco. El danés, pese a tener que sumar aún bastantes juegos se bastó de esa rotura para caminar hasta llevarse el set.
Los servicios no iban a tener mucho peligro exceptuando uno en el que el danés al principio del parcial. Se agarró para que el estadounidense no se marchara y después, en el momento más importante, con el 4-4, dio un paso más, leyó con atención los saques de Maxime y le quebró. Rune sin oposición en ese juego terminó llevándose el encuentro ante Cressy en el Open de Australia.
