Naomi Osaka es la deportista femenina mejor pagada según la revista Forbes. La japonesa de esta manera supera a Serena Williams que había sido la primera en los últimos cuatro años. Además ha establecido un nuevo récord tras los 29,7 millones de Maria Sharapova en 2015.
La revista especializada en estudios económicos ha hecho público uno que incumbe al mundo del tenis. Según unos números entre el 1 de junio de 2019 y este 2020 la asiática (37,4 millones de dólares) ha superado a Serena Williams (36 millones de dólares) como la deportista mejor pagada. Los ingresos de Osaka provienen de los premios en los torneos femeninos más los que genera por los contratos que tienen en su publicidad. La lista completa se hará oficial la próxima semana. Además hay que recordar que Osaka y Serena están entre los 100 deportistas mejores pagados del mundo. Naomi está en la posición 29 y Serena en el número 33 mostrando la importancia que tienen ambas.
Los ingresos
Según la revista un total de 14,5 millones de dólares han sido en premios de los torneos. En el año 2020 sus resultados no han sido positivos. Debido a ello y a la suspensión del circuito por el coronavirus por el momento esta temporada solo ha sumado 199.756 dólares. Osaka desde su salto a la fama ha tenido detrás a grandes empresas que han intentado tener en ella uno de sus objetivos comerciales. Grandes marcas tienen un contrato con ella como es el caso de IMG, Nike, Nissan Motors o Yonex.
El camino al estrellato de Noami
Osaka llegó a la cima del tenis femenino después de lograr el trofeo en el US Open 2018. Aquella final tuvo de todo, incluido uno de los momentos más tensos que se recuerdan de la estadounidense sobre una cancha de tenis. También logró el triunfo en el primer Grand Slam del 2019, en el Open de Australia, pero luego llegaron los problemas. Osaka cayó hasta la décima posición en el ranking femenino y demostró tener unas grietas en su tenis que hasta entonces no había tenido, quizás fruto de la presión mediática. También añadió a la prensa que su timidez es algo que le había jugado muchas malas pasadas a lo largo de su vida.
