La tenista argentina dice adiós a Roland Garros tras caer ante Rebecca Marino en dos mangas (6-4, 6-3).
Fin del sueño en París para Paula Ormaechea. La argentina no pudo superar un duro debut ante una jugadora con un poder ofensivo muy grande como es Rebecca Marino, una rival que practica un tenis muy ofensivo en todo momento y frente al que Paula no pudo imponer su juego.
Paula dice adiós
Ambas jugadoras se medían por primera vez en la arcilla de París y lo hacían en una buena dinámica. Las dos jugadoras llegaban en un buen momento de forma a la fase previa del segundo Grand Slam de la temporada, y con ganas de hacer un buen papel en una siempre exigente fase previa.
Los breaks serían constantes en el primer set con ambas jugadoras siendo efectivas al resto, sobre todo la agresiva tenista canadiense. Paula se limitaba a poner bolas en pista ante los ataques que venían desde el otro lado de la red en forma de golpes poderosos y directos, pero finalmente el juego directo de la canadiense acabó imperando en el marcador y Marino se llevó el primer parcial por 6-4.
El segundo set no empezó de la mejor manera para la veterana tenista argentina. Marino rápidamente se hizo con un break al inicio de la segunda manga que a la postre sería decisivo en el devenir del resultado final. La tenista canadiense es conocida por su gran servicio, y en el segundo set haría gala de ello al no ceder su saque en ninguna ocasión y salvando todas las pelotas de break que tuvo la tenista argentina a su favor.
El tenis físico de Ormaechea no encontraba premio ante una inspirada Rebecca Marino que se sentía muy cómoda con sus tiros planos y poderosos desde el fondo de la pista. La tenista argentina no encontró la forma de desarbolar el tenis agresivo de su su rival, y de esta forma la tenista canadiense consiguió cerrar el encuentro en dos mangas y de esta forma poner fin al sueño de Paula en París.