El balear firmó otra épica remontada a pesar de los problemas físicos ante Taylor Fritz (3-6, 7-5, 3-6, 7-5, 7-6(4)) en su duelo por los cuartos de final de Wimbledon. Nadal enfrentará a Nick Kyrgios en las semifinales del viernes.
Rafael Nadal tenía en su quinto test en Wimbledon que enfrentarse a Taylor Fritz. El español venía de menos a más en el torneo y cada vez estaba dejando mejores sensaciones Esta vez le tocaba la prueba más difícil ante un Fritz que es verdad que no había tenido rivales muy complicados pero que todavía no se había dejado ni un set en todo el torneo. En el cara a cara una victoria para cada lado con el recuerdo de ese triunfo para el estadounidense en la final del Masters 1000 de Indian Wells.
Fritz golpea primero
Nadal empezó muy agresivo y acertado en sus golpes. Rápidamente conseguía la primera ventaja con el 2-0 a su favor. Taylor Fritz no tardó mucho en recuperar la desventaja y aprovechó su oportunidad en el sexto juego para poner las tablas con el 3-3. Desde ese momento el estadounidense fue más y es que en cuanto estuvo por delante en el marcador era el que estaba más cómodo. Rafa cometía algunos errores y otras veces se precipitaba con algún síntoma de dolor, al parecer un dolor abdominal que le impedía jugar al cien por cien.
Taylor Fritz seguía ganando confianza. En el octavo juego consiguió otra rotura y tras ganar su saque con comodidad se llevaba un primer parcial por 6-3 en el que había comenzado con break en contra, pero que había reaccionado de la mejor manera.
La lucha de Rafa
Rafa volvió a empezar en el segundo parcial con un extra de energía y otra vez tomaba ventaja en el marcador, pero esta vez hasta el 3-0. El problema es que no estaba nada cómodo y no podía jugar intercambios largos por lo que cometía muchos errores por su agresividad. Fritz le devolvía la moneda y ponía el 3-3 en el casillero. Nadal después de salvar una bola de break era capaz de ganar el séptimo juego y tomar las riendas otra vez del marcador con el 4-3. Justo tras ese cambio de lado solicitó el tiempo médico por sus dolores y había que ver si Rafa estaba dispuesta a forzar.
Desde su banquillo le hacían ver que tenía que retirarse, pero Rafa volvió a coger su raqueta. Nadal siguió llevando la iniciativa y pasaba la presión al otro lado. Justo cuando Fritz sacaba para forzar el tie break llegaba la opción de cerrar el set. Tras un gran punto se llevaba el segundo parcial y había algo de esperanza.
Fritz vuelve a tomar ventaja
Muy pronto se puso de cara al tercer parcial para el estadounidense. Fritz aprovechó su oportunidad en el tercer juego y consiguió un break que tras confirmarlo le mandaba hasta el 3-1. Rafa seguía jugando a tiros pero no estaba del todo incómodo y poco a poco fue capaz de seguir ganando sus juegos al servicio. El problema es que necesitaba un break para seguir pensando en ganar la tercera manga. No lo consiguió y finalmente tras volver a perder su saque en el noveno juego Fritz se llevaba el tercer parcial para poner contra las cuerdas a Rafa.
Rafa tiene más vidas
El cuarto parcial comenzó con tres roturas consecutivas. Rafa parecía estar más cómodo al resto que al servicio y es que con su saque tenía muchos problemas por los dolores abdominales. En cambio de ese intercambio de roturas salió ganando y ponía el 3-1 a su favor. Rafa fue capaz de llevar la ventaja hasta el octavo juego y es que ahí perdió su servicio y Fritz ponía las tablas en el casillero (4-4). El estadounidense sufrió pero después de salvar una bolas de brea se llevaban el noveno e iba a restar para cerrar el partido.
Rafa no solo ganó su juego, si no que además quebró en un fantástico undécimo game. Ahora tenía el servicio para ganar la cuarta manga. El 40-0 le daban tres bolas de set y a la primera tras una derecha ganadora a la línea acababa forzando un quinto parcial que se iba a ser de infarto.
Un final para el recuerdo
Las sensaciones eran variadas al llegar a este quinto y definitorio set, con un Rafa que venía empezando a defender cada vez mejor ante la potencia del norteamericano. Los juegos avanzaban sin que siquiera surgieran oportunidades de quiebre, con un Fritz que parecía depender bastante de su primer servicio. El punto de inflexión llegaría en el séptimo juego, cuando luego de cuatro oportunidades, Nadal concretó el quiebre para ponerse 4-3 arriba en el marcador.
Cuando todo parecía decantar para el lado del manacorí, Taylor recuperó el quiebre de manera inmediata, sumando tensión a la parte final del partido. Todo se definiría en un tiebreak final. Allí, Rafa comenzó claramente mejor con una ventaja de 5-0, y si bien Fritz recuperó algo de terreno por momentos, algunos errores clave lo alejaron de una remontada. Finalmente, Rafa Nadal selló la victoria para llegar otra vez a las semifinales de Wimbledon.
