La finalista del Australian Open se despidió en segunda ronda del US Open. Muguruza cedió en un partido que tuvo dominado casi toda la primera manga. Al final derrota dolorosa ante una gran Pironkova (7-5, 6-3). Decepción de Garbiñe que tendrá que comenzar a pensar en la gira de arcilla.
Garbiñe Muguruza solo había disputado un partido desde la vuelta a la competición y había sido en el US Open. En el debut logró ganar a una combativa Nao Hibino dejando buenas sensaciones. En su duelo frente a Pironkova era la gran favorita. La búlgara había superado en primera ronda a la rusa Samsonova en sets corridos pero no esto no parecía suficiente para hacer frente a la hispano venezolana.
Bien comenzó Garbiñe muy metida en el partido desde los primeros minutos. Los dos primeros juegos fueron suyos para tomar una ventaja de 2-0 que le hacían llevar la iniciativa. La pupila de Conchita estaba muy cómoda en la pista llevando la iniciativa. Todo mejoraba más cuando en el séptimo juego disponía de un 0-40 que le hacían tener tres bolas más de rotura, aunque en ninguna de ellas llegó a consolidar el break. Todo se complicó a raíz de ese juego y es que su rival ganó mucha confianza. Llegaba el momento decisivo con el 5-4 y saque para Garbiñe. Justo en ese juego tan importante llegaron las dos primeras opciones de rotura para Pironkova y quebró poniendo las tablas en el marcador. Luego ganó el siguiente juego y de repente restaba para ganar la primera manga. Muguruza sintió la presión, la mano se agarrotó y Pironkova contra pronóstico se acaba llevando el primer parcial.
Pironkova acaba dominando
Garbiñe había sido mejor durante casi toda la manga, pero en los juegos decisivos para cerrar el set el brazo se había encogido. La búlgara estaba con más confianza y comenzaba a sentirse cómoda al servicio. Así era ella la que dominaba en todo momento en el set. Llegó a disponer de cinco bolas de break en el cuarto juego pero la hispano venezolana salió airosa de la situación. Esto podía ser otro momento de inflexión en el partido pero es que Pironkova no daba el brazo a torcer en su servicio.
El duelo continuó igual hasta el 4-3 para Tsvetana que supo que era el momento de pasar la presión al otro lado y apretar. Garbiñe necesitaba ganar ese juego pero un 30-40 le ponían contra las cuerdas. La búlgara no falló y el 5-3 se confirmaba en el marcador. Muguruza estaba a un solo juego de despedirse en el US Open. Con mucha solvencia y en blanco ganó el juego para dar la gran sorpresa y clasificar a tercera ronda apeando a la reciente finalista del Australian Open.