Garbiñe Muguruza sigue mejorando según pasan los días en el Australian Open. En cuartos de final superó a Anatasia Pavlyuchenkova en sets corridos y se medirá por un puesto en la final ante la rumana Simona Halep. Ante los micrófonos se mostró feliz y con ganas de seguir avanzando en el trofeo.
Conchita Martínez ha vuelto a traer a Garbiñe alegrías. Después de un gran inicio del año lucharán por llegar a la final del Australian Open ante Halep. Muguruza ha ido superando escollos durante el torneo y mejorando sensaciones con el paso de los días. Ahora se convierte en una rival muy peligrosa para cualquiera y se siente con ganas y ambición de mas como ha explicado ante los medios de comunicación.
Mejores sensaciones cada día
«Está siendo un torneo donde he ido de menos a más, no empecé de la mejor forma. Cada día que ha pasado he ido recuperándome. Siempre es especial llegar lejos en un torneo de Grand Slam. Está siendo un torneo largo, con oponentes duras, incluso las que no son cabezas de serie. Estoy feliz de ir superando cada partido, ahora quiero ir a por más» añadió sobre su evolución en el torneo en las dos semanas de competición.
Expectativas superadas
Garbiñe Muguruza después de su gran inicio de año aparecía como una de las tapadas pero era una incógnita saber cómo iba a llegar después del proceso gripal que le hizo retirarse en el torneo de la semana previa al primer Grand Slam del año. «Cuando llegué a Melbourne no pensaba en llegar muy lejos, no me sentía demasiado bien. Realmente, en ningún momento me planteé hasta dónde podía llegar. Con el paso de los días fui sintiéndome cada vez mejor«.
La próxima rival, Halep
«Será un partido difícil. Creo que no importa demasiado el momento en el que juegues contra una jugadora que forma parte del top 5, siempre será un duelo complicado y más en una ronda final. Es una tenista muy sólida, lleva muchos años compitiendo con mucha consistencia» añadió sobre el duelo de semifinales.
Los malos resultados de los últimos años
La regularidad ha sido el principal problemas de Garbiñe en los últimos años. Después de conocer el éxito de ganar Grand Slam y subir a la cima del tenis mundial femenino cayó a una crisis total. «El momento más duro es cuando estás trabajando duro pero sientes que los resultados no llegan a tiempo. Es la parte más difícil por la que puede pasar un tenista, corres el riesgo de desesperarte un poco, de pecar de impaciente. Es muy difícil estar varios años en la cima desarrollando tu mejor tenis. Para mí, siento que es algo muy difícil de hacer«.