Elise Mertens consiguió el pase a las semifinales del WTA 500 de Melbourne en el Gippsland Trophy al eliminar a Elina Svitolina por 6-3, 5-7, 10-6 en el duelo jugado en la Mararet Court Arena. Se medirá a Naomi Osaka en su próximo reto.
La cabeza de serie No.7 del cuadro, estaba rindiendo muy bien durante esta semana previa al Open de Australia, venía de ganar a Mayo Hibi y Caroline Garcia para presentarse en los cuartos de final. Durante el primer parcial, consiguió cosechar un quiebre que iba a ser vital en este quinto encuentro que disputaban. La ucraniana tenía el 3-1 favorable en el cara a cara, pero justamente la única victoria de la belga, había llegado en estas mismas instalaciones en el Grand Slam de 2018.
Mertens caminaba bastante mejor sobre la cancha y consiguió alzarse en el primer parcial. En el segundo, además, la diferencia fue a más con Svitolina encontrándose muy fuera del partido a nivel anímico sin que los golpes le pudiesen funcionar. Por ello, la belga se fue con dos quiebres por arriba hasta situarse con el 5-2 y servicio para cerrar el envite.
Llega la remontada
En aquel momento, con la complicación de cerrar una cita de estas características, Elina logró forzar su primera rotura en el partido, siendo el instante para marcharse al 3-5. La diferencia era muy grande aún para la belga ya que gozaba de otro quiebre más. Sin embargo, esa sensación álgida iba a disminuir en Elise ya que Svitolina fue poco a poco jugando más y forzando más el encuentro.
Con 5-4, el juego iba a estar lleno de tensión y nervios por parte de ambas. Mertens, tuvo hasta tres puntos de partido, y Svitolina a la cuarta de break que gozó llegó a la igualdad en un partido que parecía estar totalmente perdido minutos atrás. Con el 5-5 todo arrancaba de nuevo con sensaciones muy opuestas. El partido había cambiado completamente y la ucraniana, forjó su estado remontando al cosechar cinco juegas de manera consecutiva y forzar el set definitivo.
Drama para el desenlace
Mertens fue camino hacia vestuarios antes de comenzar un Super Tie-Break y le vino a la perfección ya que sirvió para replantearse las cosas y poder frenar el ritmo de la ucraniana. Se situó con 5-0 con Elina volviendo a esas sensaciones no tan buenas que le habían acompañado en la cita. La séptima preclasificada del cuadro, se marchó hasta un sólido 7-2, pero fueron dos puntos seguidos de Elina los que abrieron nuevamente en el electrónico y que se pusiera a servir. Sin embargo, antes del segundo cambio de lado, Mertens obtuvo otro punto clave que fue luchado por ambas y que lo finalizó cercano a la red.
El segundo punto con saque de Svitolina también fue para Elise con un revés paralelo ganador. Con ese winner, le llegó otro punto de partido. Aun así, no iba a ser ese punto el que dictaminara el duelo. Acto seguido, llegó otra doble falta y el miedo a finalizar el duelo le volvió a traspasar el cuerpo. El marcador reflejaba un 6-9 para que finalmente con un error de la ucraniana hiciera finalizar la cita.