Daniil Medvedev habló en rueda de prensa tras su triunfo en semifinales del Masters 1000 de París-Bercy, frente a Milos Raonic. El ruso comentó cómo espera la definición del torneo ante Zverev, y la motivación por volver a ganar partidos importantes en esta semana.
La previa de la final
Medvedev recordó sus primeros enfrentamientos ante Alexander Zverev, con el que pierde en su historial por 5-1. “En los primeros partidos que jugamos, él ya estaba en el Top 20 o Top 10. Yo era solo un tipo en ascenso. En cierto modo, tenía sentido que ganara. Me ganó en San Petersburgo y luego ganó el torneo. Me ganó en Miami donde llegó a la final. Él era más fuerte que yo en ese momento. Todos los partidos, incluso los de San Petersburgo, Miami, fueron enganchados”.
El ruso comenta que no es una rivalidad con la que alguno de los dos se sienta cómodo, ya que suelen jugar muchos puntos extensos con varias idas y vueltas. “A los dos no nos gusta jugar demasiado, creo, porque es un poco como contra Novak, vamos a tener muchos intercambios, cosas divertidas. Creo que será un buen partido para él y para mí“.
Recuperar sensaciones en París-Bercy
Medvedev se mostró muy satisfecho por volver a tener una gran semana donde consiguió triunfos en un buen nivel, después de algunos meses irregulares luego del US Open. “El tenis, excepto los tres grandes (Big Three), a los que ves ganando casi todos los torneos, no es tan fácil. Son 20-25 torneos para jugar en el año y no vas a jugar bien en los 25 torneos. En San Petersburgo, sentí que jugué bastante bien, pero tuve mucha mala suerte contra Opelka. En Viena, no necesariamente me sentía bien con mi tenis, pero logré ganar dos partidos”, indicó el nacido en Moscú.
“Me alegro de que pueda recuperar sensaciones esta semana en Paris-Bercy. Es un torneo que me gusta, aunque no lo he hecho antes. Espero que esta confianza continúe durante mucho tiempo después. Pero nunca estás seguro”.
El balance sobre su 2020
En relación a su temporada, el ruso reconoce que pudo haber tenido un mejor rendimiento, sobre todo pensando en su impresionante segundo semestre de 2019. “No creo que sea el mejor tenis que he podido jugar este año. Jugué bien a principios de año, luego hubo confinamiento. En el US Open y en Cincinnati jugué bien. Luego trabajé duro, en pretemporada y durante el encierro. Si entrenamos bien, hacemos nuestro trabajo, las sensaciones regresan inevitablemente. Este es el caso aquí en París. Me siento bien. Será mi primera final en Francia”.