Pedro Martínez se reencuentra con la victoria en Alemania. El jugador español fue elevando su nivel para terminar venciendo al italiano Arnaldi en la primera ronda de Hamburgo. 7-6 y 6-1 las claves del triunfo para avanzar a octavos de final.
Martínez saca lo mejor de su tenis en Hamburgo
El español Pedro Martínez (49°) viene arrastrando cuatro derrotas seguidas desde aquella victoria contra Tirante en la primera ronda de Roland Garros. Luego de su paso fugaz por Wimbledon, el tenista de Alzira debutaba en el ATP 500 de Hamburgo, volviendo a las canchas de arcilla. Martínez quería reencontrarse con la victoria, para eso tenía que oponerse al italiano Matteo Arnaldi (39°) en la primera ronda del torneo alemán. Arnaldi, sexto preclasificado, tuvo un gran desempeño en el Abierto de Francia, alcanzando los octavos de final, aunque no le fue muy bien en césped. El último tramo de la temporada no ha sido bueno para el español, pero no hay que dejar de lado que fue campeón en Girona y finalista en Estoril.
El español se hizo fuerte en el tiebreak
Los tenistas empezaron bastante firmes en los primeros juegos, se produjeron algunos intercambios donde ambos buscaban soltarse. Sin inconvenientes con el servicio, el español y el italiano establecieron los principales dígitos en el marcador. Por momentos, Arnaldi conseguía puntos ganadores con la derecha, pero no podía mantener la consistencia. En el sexto juego, el italiano generó espacios con golpes amplios y precisos para concretar el primer quiebre a su favor. Matteo se afirmó en el fondo de la cancha desplegando un tenis punzante, la propuesta del italiano resultaba ser algo incómodo para Martínez. De igual manera, el español pudo estabilizar su tenis, tomó la iniciativa y recuperó el quiebre. El set tuvo dos rupturas extras, una por lado, lo que llevó a los jugadores a un desempate. En el tiebreak, Martínez se mostró más consistente, distribuyó bien los tiros y se quedó con el primer parcial.
Martínez desplegó un juego eficiente
El italiano saltó al terreno con mayor convicción de sus cualidades y desenfundó una devolución efectiva para fracturar el saque del español. Sin embargo, Martínez exhibió toda su jerarquía neutralizando el tenis de su oponente para luego enredar las cifras. El tenista de Alzira tomó el control absoluto del juego, dominó los puntos con impactos abiertos y quebró nuevamente en el cuarto game. El revés paralelo del español marcaba una gran diferencia en el duelo, le otorgaba tiempo para construir la jugada. Martínez continuó en su mejor forma, resolvió perfectamente cada golpe y se adueñó de los números con otro break. Finalmente, Pedro se hizo cargo de su servicio con el que se apropió del triunfo tras un 6-1 final.