El sueco habló con el portal Tenis Brasil sobre cómo fue su etapa con Federer. El suizo logró con Lundgren su primer trofeo Grand Slam en Wimbledon 2003, aunque como reconoce el ex tenista Roger era un chico con mucho talento pero poco trabajador.
Roger Federer ha ido labrándose un hueco en la historia del tenis para convertirse en el mejor. En cambio nunca fue una adelantado, ya que su primer gran trofeo tardó en llegar. Wimbledon 2003 fue el lugar y además tiene una historia bonita ya que uno de sus entrenadores ayudantes Peter Carter falleció en 2002 a causa de un accidente de tráfico.
Poco trabajo en los inicios
Tal y como reconoció su entrenador Federer en sus inicios ya tenía un don para el tenis pero en cambio le costaba trabajar, era un poco vago. «No es fácil trabajar con un jugador de tenis, pero en ese momento Roger Federer era un joven talentoso pero algo vago. Tenía problemas para concentrarse y no estaba listo físicamente«.
Siempre quiso ser el mejor
En cambio siempre destacó que en la mente del suizo siempre estuvo ser el mejor. Después de la carrera más laureada que ha visto el tenis se mostró muy orgullo de haber sido uno de sus primeros entrenadores. «Aun así siempre quiso ser el mejor y me di cuenta de que tenía potencial para serlo. Era una persona con la que al principio me costó trabajar pero tiene un gran corazón, es un gran tipo y ha seguido creciendo hasta convertirse en un embajador del tenis. Estoy orgulloso de él«.
Una explosión más tardía que Nadal
Después de todo el trabajo comentó que no tuvo un camino fácil ya que su primer Grand Slam llegó con 22 años, mucho más tarde que algunas jóvenes promesas del tenis mundial, entre ellos el propio Rafa Nadal con el que guarda una gran relación. «Es difícil explicar cómo se forma a un jugador. Hay que pulir la técnica y también trabajar la parte mental y física. Todos estos componentes deben unirse si quieres llegar a lo más alto. Federer ganó su primer Grand Slam con casi 22 años, no todos son como Rafa Nadal«.
La historia de Peter Carter y Wimbledon 2003
Recordó con cariño el primer triunfo en Grand Slam, allá por 2003 en Wimbledon. Además fueron situaciones duras las que habían vivió anteriormente ya que Peter Carter era otro de sus entrenadores pero falleció en un accidente de tráfico en 2002. «La victoria de Federer en Wimbledon de 2003 fue muy especial para los dos. Quise ganar Wimbledon cuando era tenista pero me quedé en octavos de final. Al menos lo gané como entrenador, y eso me hizo muy feliz. Para Roger, esta victoria era lo que muchos esperaban de él. Fue un alivio para él. Era un chico talentoso, un diamante por pulir. Peter Carter y yo le ayudamos a llegar a la cima. De empezar de cero a ganar Wimbledon. Ojalá Peter hubiera estado aquí para haberlo vivido«.
