El año 2017 ha sido diferente a los últimos. Sólo cuatro de los diez jugadores que empezaron el año en el top-10 han podido acabar con registros similares. Las lesiones han sido el principal problema de esta campaña. Nadal y Federer han vuelto a reinar en el ranking. Analizamos los grandes cambios de este año.
¿Quién diría que dos jugadores del `Big Four´ no acabaría el año en el top-10? Seguro que nadie. El nivel exhibido por Djokovic y Murray en 2016 fue un espectáculo que dejó atónito al mundo del tenis. Es cierto que no fue culpa suya no acabar el año entre las diez mejores raquetas, ya que las lesiones hicieron mella en ellos, lastrando su estado físico. A estos dos grandes favoritos para acabar el año en lo más alto se unieron Raonic, Nishikori y Wawrinka.
Por suerte estas lesiones las han sabido aprovechar a las mil maravillas la generación más joven. Conocidos como Next Gen en el circuito ATP, Zverev y Thiem han cuajado un año fabuloso en el que han confirmado el relevo generacional. También hay que mencionar a Dimitrov, ya que a sus 26 años consiguió dar ese salto de calidad que le faltaba para afianzarse entre los mejores.
Las lesiones cambian el top-10
Murray, Djokovic, Wawrinka, Nishikori, Monfils, Berdych y Raonic no han podido completar el calendario de su planificación debido a las lesiones. Siete de los diez jugadores que acabaron en el top-10 no han podido finalizar la temporada en estos puestos privilegiados, cayendo posiciones en la clasificación. Cinco de ellos superan la treintena de años y en un deporte tan exigente como es el tenis, la preparación debe ser mucho más cuidadosa. La mayoría de tenistas que superan la cifra de los 30 años han sufrido lesiones que les han mantenido alejados de las pistas durante una temporada.
El británico se despidió del tramo final de la campaña, debido a la lesión que arrastraba en su cadera. A priori y según su entrenador Jamie Delgado aparecerá en Brisbane en las mejores condiciones. Djokovic dijo adiós a la temporada en Wimbledon tras retirarse en el partido de cuartos de final ante el checo Berdych. Rápidamente anunció que se bajaba de la segunda mitad de la temporada, debido a los problemas que seguían en el codo.
Stan Wawrinka no pudo defender su título en el US Open tras tener que pasar por el quirófano para operarse la rodilla. El helvético sin jugar ni la de torneos que la temporada pasada, ha sido capaz de mantenerse en el top-10, exactamente en el puesto nueve del ranking. El japonés Nishikori tampoco acudió al último Grand Slam de la temporada, tras sufrir un desgarro en el tendón de la muñeca derecha. El gigante canadiense Raonic, sufrió el mismo problema y decidió recuperarse para empezar la temporada en las mejores condiciones.
Los jóvenes toman el relevo
Este problema de los más veteranos, lo han sabido aprovechar las dos siguientes generaciones. Por un lado tenemos a Goffin, Carreño, Sock y Dimitrov. Los cuatro superan los 25 años y siempre habían sido jugadores combativos y regulares que se mantenían en el top-25. Les faltaba dar ese pasito que les alzaría al top-10. Con la baja sensible de los mencionados anteriormente, han podido llegar a fase finales que les han aportado confianza. Al final de la campaña se han colado con los ocho mejores de la temporada, acudiendo a Londres para disputar el Masters.
Debajo de ellos llegan otros dos jugadores más jóvenes, Thiem y Zverev. El alemán se ha consagrado como el futuro del tenis mundial, sumando cinco títulos y venciendo a los mejores jugadores del circuito. El austriaco sigue teniendo que mejorar sus prestaciones en hierba y pista dura, pero de momento su regularidad le sirve para tener un hueco entre los más grandes. El teutón acaba en cuarto lugar la temporada y justamente detrás el de Wiener Neustadt.
El resurgir de Nadal y Federer
Los otros dos componente del `Big Four´ Nadal y Federer recordarán este 2017 por su gran nivel de tenis. Entre los dos han sumado cinco Masters 1000 y los cuatro Grand Slam, uno números sobresalientes. Español y helvético han vuelto a ese tenis que les llevó a lo más alto del ranking. Sin duda ha sido la sorpresa más positiva de esta campaña y están decididos a seguir con el mismo nivel en 2018. Dos de los mejores jugadores de la historia que ha dado este deporte deberán luchar con los retornos de los lesiones y las ganas de los más jóvenes.