Opinión

La última gran oportunidad de Stan Wawrinka

Stan Wawrinka y su gran última oportunidad
Stan Wawrinka en un encuentro en el pasado Aus Open. Foto: Zimbio

Si hablamos de tenis en Suiza, el nombre propio es y será Roger Federer. No obstante, a pesar de que hacerle sombra al tenista de Basilea es prácticamente imposible, si hay alguien que le ha robado algo de protagonismo en su propio país ha sido Stan Wawrinka.

A la sombra pero candidato
El de Lausanna siempre fue un tenista de gran talento, pero no fue capaz de alcanzar su madurez tenística hasta bien entrada su carrera. Y el punto de inflexión no fue otro que el Open de Australia de 2014, donde Stan fulminó a Djokovic en cuartos de final y venció a Rafael Nadal para alzarse con su primer título.
A partir de este momento, Wawrinka ha sido un jugador irregular pero certero, capaz de lo mejor y de lo peor. Es por ello que, pese a la ausencia de regularidad, ha sido capa de levantar el título en Roland Garros y en USA Open, ambas finales ante Djokovic y mostrando un nivel excelso de tenis. Por tanto, rozaría la grosería el hecho de no considerar al suizo como uno de los mejores tenistas de la pasada década, y es por ello que nos acostumbramos a verle como la gran alternativa del Big 4, también debido a la falta de empuje de las nuevas generaciones de tenistas.
Wawrinka quiere más

No obstante, el tenis de Stan se ha ido apagando en los últimos dos años, afectado y lastrado por su grave lesión de rodilla y ciertos conflictos internos con su entrenador Magnus Norman, que le han impedido una estabilidad mayor. A pesar de ello, debido a su grandísimo talento, nos ha regalado algún partido épico como fue el duelo ante Tsitsipas en octavos de final del pasado Roland Garros, que supuso un recital de golpeos y un intenso duelo en el que Wawrinka se pudo llevar el gato al agua.

A día de hoy, el tenista de 34 años también conocido como Stanimal se encuentra en la decimotercera posición del ranking y más cercano a la retirada que a un nuevo gran título. Sin embargo, ciertos brotes verdes en el pasado Open de Australia recordaron a su mejor versión y dejan un cierto halo de esperanza en lo que a este año se refiere. ¿Será capaz de recomponerse el suizo y optar a un Grand Slam de nuevo, justo cuando parece que más van a apretar los jóvenes y en la dinámica de títulos en la que siguen Djokovic y Nadal? El tiempo nos traerá por tanto la respuesta de un tenista que probablemente merezca una última gran alegría.

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