Sebastian Korda será el que se mida a Andrey Rublev en la final de Gijón, y lo hace tras derrotar a Rinderknech en dos sets (7-6(2), 6-3).
Gijón buscaba a su segundo finalista de su edición inaugural, y lo hacía con dos tenistas que buscaban su primera final en muchos meses. Korda llegaba a esta ronda tras derrotar a Andy Murray en tres sets, mientras que Rinderknech lo hacía al vencer a Pablo Carreño en un apasionante partido en donde el gijonés tuvo varias pelotas de partido para avanzar a semifinales, pero en donde se vino abajo en momentos clave frente a un jugador que no le tuvo miedo a nada.
Korda continúa con su gran nivel
El americano y el francés medían fuerzas por un puesto en la gran final asturiana. El primer parcial empezó con ambos jugadores demostrando su buen hacer al servicio en los compases iniciales, y sin ceder ningún resquicio al resto. Los juegos fueron pasando y la paridad continuaba en un encuentro en donde Rinderknech dispuso de varias pelotas de set al resto. Korda solventó todas las oportunidades del jugador galo y se acabó llevando una trabajada primera manga por 7-6 para de esta forma tomar ventaja en el encuentro.
El jugador americano aprovechó su ventaja para soltarse en el comienzo del segundo set, y su juego sólido y explosivo fue suficiente para que tomara las riendas del segundo set frente a un adversario que no se mostraba cómodo en los juegos al resto. El break no tardó en llegar, y de esta forma era el jugador americano el que tomaba las riendas del encuentro con el paso de los juegos. El duelo se cerró con un único break en el encuentro, pero que le sirvió a Korda para sumar una victoria que le mete en la final de Gijón en donde se medirá al ruso Andrey Rublev en busca de un nuevo título en su carrera.
