El entrenador de Daniil Medvedev concedió una entrevista para la página oficial de la ATP. Gilles Cervara fue premiado como mejor entrenador del año 2019. El galo ha dejado claro la confianza que tiene con su pupilo y que todavía tiene margen de mejora.
Todas las temporadas dejan sorpresas positivas. El aspecto de los entrenadores suele ser menos recompensado que el de los jugadores, aunque tiene mucha parte de la culpa del éxito de sus pupilos. El 2019 puso a Gilles Cervara en lo más alto con el premio a mejor entrenador después de los grandes números de Daniil Medvedev. El francés habló desde cómo fueron sus inicios, la experiencia en la ATP Cup junto a Safin o la gran victoria ante Wawrinka en Wimbledon.
La experiencia con Safin en la ATP Cup
«Fue interesante estar con Safin en la ATP Cup. No era la misma vista que tenía desde mi posición de entrenador, como él lo vio por el hecho de que fue un jugador Top. En la sala de estrategia o en la cancha, siempre me preguntaba si podía decirle algo a Daniil. Siempre dio un buen consejo, a pesar de que nuestra forma de expresar nuestros pensamientos es diferente. No he tenido mentores del coaching, pero admiro a las personas con personalidad, de otros deportes y la vida en general, la forma en que viven y entienden la vida. Marat nunca fue agresivo. Ofreció una perspectiva diferente y aprendí muchísimo, tal como lo hice con mi propia carrera» explicó sobre la primera edición de la ATP Cup en la que convivió con el equipo ruso.
Los inicios de Cervara y Medvedev
El ruso se mudó joven a Francia para seguir creciendo como tenista. Cervara relata cómo fueron sus inicios y destacó esa complicidad que existía entre ambos desde su primer viaje. «En 2015, se suponía que su entrenador principal iría a Marsella con Daniil, pero no pudo porque estaba en otro torneo con otro jugador. Entonces se decidió que iría con Daniil a Marsella. Hicimos un buen trabajo juntos y fui cuidadoso y sensible con su personalidad, por lo que jugó bien y se sintió bien con su tenis. Un año después, para la temporada de césped, fuimos a algunos torneos y más tarde, en 2016, asistimos a algunos más» añadió.
La victoria ante Wawrinka en Wimbledon 2017
En el tercer Grand Slam del año sorprendió a todos superando a Stan Wawrinka. «Fue una gran victoria vencer a un jugador superior como Wawrinka. Significaba algo. No estaba trabajando con él todo el tiempo, pero era un buen jugador, aunque pude ver que no había nada consistente en su preparación. Eso es lo que desarrollamos, cuando me pidió que fuera su entrenador de tiempo completo. Tenía una visión clara de que necesitábamos mejorar este día tras día y construí un equipo alrededor de Daniil para ayudarlo» dijo sobre aquel triunfo.
Un trabajo de equipo
Daniil Medvedev en sus inicios era algo débil físicamente y a veces se le escapaban los partidos por su falta de fortaleza mental. Gilles Cervera compartió su premio de mejor entrenador en 2019 con sus compañeros, el preparador físico (Eric Hernández) y la psicóloga (Francisca Dauzet), además de con el científico (Yann Le Meur). Entre todos ellos han logrado hacer de Medvedev un campeón. «Eric estuvo allí desde el principio, trabajando en el centro como entrenador físico, pero sabía que, como entrenador, la fuerza física de Daniil era débil y necesitábamos hacerlo mejor. Fue lo mismo con el enfoque mental con Francisca, con Daniil aceptando y dándose cuenta de que necesitaba hacer este trabajo. Daniil era sensible a Yann, a quien conocía antes, y trabajamos bien juntos para ser fuertes físicamente, porque la recuperación en los deportes es una pequeña parte. Si no estás bien entrenado físicamente, la recuperación no significa nada«.
Una gran relación
Después de tanto tiempo juntos entrenador y jugador han forjado un gran relación. «De alguna manera podemos decir amigos, pero es difícil usar esa palabra desde mi lado. Tenemos una muy buena conexión, no se trata de hablar, a veces se trata de solo una mirada para transmitir energía y emoción, de no preocuparlo con cosas que me preocupan. Trabajo en mi entrenamiento para desarrollar mis habilidades, como lo hace Daniil con su tenis. Ambos son enfoques diferentes del deporte, pero tenemos un buen vínculo y un objetivo. Quiero que se dé cuenta de su potencial y tenga la mejor carrera que pueda» finalizó.
