Coco Gauff tuvo que despedirse del WTA Melbourne 500 Gippsland Trophy al sucumbir ante Katie Boulter por 6-3, 5-7, 2-6 tras haber tenido servicio para poder ganar el encuentro. La británica se medirá a la ganadora entre Naomi Osaka y Alizé Cornet
Llegaba la segunda cita para ambas jugadoras. Gauff, tuvo que sacar adelante un partido que se le endureció durante el desenlace ante una batalladora Jil Teichmann. En su segundo compromiso, se medía a Katie Boulter, una jugadora que ha pasado por un periodo de lesiones pero que se encuentra con moral suficiente para poder ascender en la clasificación.
La estadounidense comenzó sucumbiendo en el primer juego del partido con la británica aprovechando esa bola de quiebre. Aun así, la joven de 16 años, fue mejorando sus prestaciones sobre la cancha y consiguió realizar dos quiebres consecutivos para situarse por delante. En apenas 30 minutos, cerró la primera manga con un 6-3.
Gauff termina hundiéndose
El segundo fue muy peleado para ambas pero respetándose el primer golpe la mayoría de las veces. Llegaron los momentos duros y la estadounidense quebró para gozar de servicio para cerrar el envite con 5-4. Ese instante fue muy duro para ella ya que además de verse con un 0-40, únicamente pudo realizar un punto en los próximo siete. Es decir, la británica consiguió dar la vuelta a un marcador muy adverso y cerrar el segundo asalto por 7-5.
La balanza en el tercero fue decayéndose hacia la jugadora británica que ocupa el puesto No.376 del ránking. Durante los primeros juegos no hubo quiebres pese a que todo iba muy rápido. En el sexto juego, Boulter logró quebrar y tras confirmarlo, pasó por la silla para restar por el encuentro con un 2-5. Los nervios de la estadounidense eran enormes y cometió tres dobles faltas consecutivas llevando a Katie teniendo su primera bola de partido. Lo aprovechó y por ello, selló su pase a tercera ronda en el Gippsland Trophy.
