Alejandro Davidovich arrancó su aventura en Basilea con una trabajada victoria sobre Lorenzo Sonego. El español había sufrido un quiebre temprano, pero logró afirmarse rápidamente y se mantuvo lúcido a lo largo del encuentro para vencer en sets corridos al italiano.
Davidovich supera una dura prueba en Suiza
El español Alejandro Davidovich (18°) afrontaba la última parte de la temporada y se presentaba en el ATP 500 de Basilea para dar una nueva función. Después de su retiro en Toronto, el malagueño perdió un poco de confianza y se alejó de su mejor versión en los últimos torneos que disputó, arrojando un saldo negativo de cuatro victorias en diez partidos. En su estreno en Basilea, el tenista español tenía una prueba complicada ante el italiano Lorenzo Sonego (45°), que venía de hacer cuartos de final en Estocolmo. Sin enfrentamientos previos en el circuito ATP, ambos llegaban a este encuentro con números regulares en indoor, aunque Davidovich partía como favorito por su posición en el ranking.
El español se adapta al juego y gana el tiebreak
La balanza se inclinó rápidamente a favor de Sonego, quien resolvió con autoridad en su primer turno de servicio y se benefició de los errores del español para sumar un quiebre temprano. Sin titubeos en los primeros compases del partido, el italiano hizo correr la pelota con facilidad y se colocó rápidamente 3-0 en el score. En el quinto juego, Davidovich se mostró firme en la devolución, produciendo sus primeras chances de break, aunque no pudo contrarrestar el saque de Sonego. El malagueño encontró su lugar en la pista, reforzó su juego de fondo y neutralizó los ataques del italiano para nivelar las cifras.
En el tramo final del asalto no hubo diferencias entre los participantes, lo que derivó en un desempate. En el tiebreak, Davidovich estuvo más preciso que su rival, respondió con certeza en los intercambios y se adjudicó el primer set.
Davidovich encuentra el camino de la victoria
Las primeras interacciones del segundo parcial generaron cierta incomodidad en el español, quien debió convivir con una bola de quiebre y puntos adicionales. Por su parte, el italiano realizó un buen trabajo en su primer turno de saque. Posteriormente, en el cuarto game, Davidovich exhibió una sólida defensa para generar su oportunidad de ruptura, pero se encontró con una brillante respuesta de Sonego. El desarrollo se mantenía equilibrado, con aciertos y errores de por medio, aunque sin quiebres. Con menos margen de error, Lorenzo prevalecía en las cifras con su mejor tenis, intentando tomar la iniciativa. Sin embargo, Davidovich logró imponerse en la devolución, doblegando al italiano y firmando un quiebre clave para ganar el partido con un 6-4 final.

