Francisco Cerúndolo jugará la final del ATP de Umag. El argentino derrotó en sets corridos al ruso Andrey Rublev para meterse en la quinta definición de su carrera. Cerúndolo buscará coronarse por tercera vez en el circuito, espera al ganador entre Musetti y Mensik.
Cerúndolo tumba al máximo favorito en Umag
El primer partido correspondiente a las semifinales del ATP 250 de Umag contaba con la presencia de un tenista argentino. Francisco Cerúndolo (37°) ansiaba llegar al último partido después de un triunfo muy apretado contra el italiano Sonego en cuartos de final. Su adversario en semifinales era el ruso Andrey Rublev (9°), primer preclasificado, quien venía de una dura batalla con el húngaro Marozsan. El moscovita y el argentino se habían cruzado en otras dos oportunidades, la serie estaba igualada con una victoria por lado. Rublev sigue buscando su nivel más alto en este torneo, en un camino sinuoso ha logrado sembrar buenas sensaciones. Por su parte, Cerúndolo sigue intentando estabilizar su tenis para sumar buenos resultados.
Francisco se llevó una manga ajustada
Luego de un primer juego cerrado, Cerúndolo logró sacar diferencia en el score con una cadena de golpes efectivos, abriendo la cancha con la derecha y definiendo por el otro costado. Sin embargo, Rublev se afirmó en el fondo en el saque del argentino, arriesgó con la devolución para recuperar el quiebre. Acto seguido, el ruso desplegó sus mejores tiros y con un revés paralelo puso el marcador 2-2. La contienda tomó un rumbo disputado, los tenistas empezaban a soltarse con grandes ejecuciones mostrando todas sus cualidades. Cerúndolo calibró los tiros en el octavo juego, agarró la lanza, fabricó múltiples chances de ruptura, pero Rublev pudo escapar con buenos impactos. La paridad se estiró hasta el desempate, allí Francisco logró ser más cauteloso y cerró el primer set.
El argentino fracturó rápido y sostuvo la ventaja
Ambos participantes comenzaron con el pie derecho en el segundo parcial, resguardaron bien el servicio para establecer los primeros dígitos. En el tercer juego, el argentino ancló muy bien su tenis en la arcilla reprimiendo los saques de su rival y con una derecha a contrapié marcó un nuevo quiebre. En esta ocasión, Cerúndolo logró validar la ventaja en los números para colocarse 3-1 arriba. Francisco seguía administrando correctamente la diferencia en el score, sus saques le otorgaban buenos resultados y conseguía apertura con la derecha. Rublev se quedó sin ideas para aplicar contra su oponente, no podía controlar los puntos desde la devolución. Entre aciertos y errores, Cerúndolo pudo liquidar el encuentro con un 6-4 después de cinco puntos de partido.