La tenista polaca rememoró la difícil situación que vivió a finales del pasado año, con su positivo en trimetazidina con el que fue sancionada con un mes sin jugar.
Iga Swiatek vuelve a hablar de su positivo por dopaje
La vida vuelve a sonreír a Iga Swiatek. Tras más de un año sin levantar título alguno, la tenista polaca resurgió de sus cenizas levantando su primer trofeo de campeona en Wimbledon, el Grand Slam sobre hierba. Además, acaba de empezar su andadura en el WTA de Montreal con una autoritaria victoria en dos sets, demostrando que su éxito en el All England Club no ha sido casualidad.
Sin embargo y con motivo de su visita al podcast ‘Served with Andy Roddick‘, cuyas palabras también recoge Eurosport en su web, la actual número tres del mundo volvió a referirse a la complicada situación que vivió a finales de 2024, cuando saltó la noticia de que había dado positivo por una sustancia prohibida denominada trimetazidina, integrada en un suplemento como la melatonina que la propia Swiatek tomaba para combatir el jet lag.
Todo ese asunto, que terminó con una irrisoria sanción de un mes sin jugar y que Swiatek cumplió en una gira asiática en la que teóricamente estaba lesionada, conllevó mucha polémica y, al igual que en el caso de Jannik Sinner, no fueron pocos los compañeros/as que criticaron un supuesto doble rasero en comparación con lo sufrido por otros tenistas del circuito en casos parecidos.
De todo eso habló la de Varsovia. Cómo recibió la noticia, su impacto y las dudas que sobrevolaron su cabeza al preguntarse si la opinión pública creería su versión de los hechos o no.
La noticia del positivo
“Fue bastante terrible. Estaba en una sesión de fotos con mi patrocinador en Varsovia. Estábamos cambiando de ubicación y fui a ver mi correo electrónico y vi que recibí un email de este portal. Y pensé que solo era un recordatorio para averiguar mi paradero o algo así. Pero sí, decía eso y ni si quiera lo leí porque comencé a llorar. Y los agentes que estaban conmigo durante la lesión, literalmente pensaron que alguien había muerto“.
“Entonces le di el teléfono a mi gerente y ella leyó todo. También estaban bastante confundidos, porque obviamente nadie sabe qué hacer en una situación como esa. No tenía ni idea de si debía continuar con la sesión, porque mi cara estaba roja. Estuve llorando probablemente durante 40 minutos”.
Desconfianza hacia la opinión pública
“Era un desastre total, cuando todo el mundo salió estuve llorando durante dos semanas. No pude entrenar, no pude salir a la pista porque sentía que el tenis me había hecho esto a mí y que estaba en ese lugar por culpa del tenis. Sentí que había perdido mi integridad, que nadie iba a creer que no había hecho nada malo, y que el mundo entero me iba a dar la espalda y que estaba acabada, que todos los logros que había tenido iban a desaparecer de repente”.
Rápida respuesta
“Mi equipo me ayudó mucho a que el proceso fuera lógico. Básicamente nos dijeron a mí y a mi abogado lo que teníamos que hacer. Comenzamos a probar todos los suplementos y medicamentos, que tomo, y sí, simplemente se hizo una investigación”.
Cobijo en sus amistades
“Ellos no tenían ni idea de lo que estaba pasando, pero uno de ellos adivinó que estaba en problemas porque no estaba jugando y no estaba lesionada. Se lo conté aunque me dijeron que no debía contarlo a nadie por el alboroto que se podría montar en redes sociales, porque si no das ninguna explicación, ni ningún dato, sin ninguna prueba de que no hice nada malo puede suceder que te odien”.
“Pero independientemente de lo que digan otros deportistas, se lo conté a mis amigos y fueron bastante racionales, pero algunos se enfadaron porque no estás revelando toda esta información de inmediato. Si tengo que contárselo a todo el mundo sin poder defenderme, no sé qué habría pasado, habría estado en una situación muy mala”.
Trabajo psicológico
“Tenía tantos pensamientos diferentes sobre todo este proceso… Ella me ayudó a encontrarle algo de lógica a pesar de que fue súper difícil, estoy agradecida por poder jugar de nuevo en lugar de centrarme en lo malo que me pasó“.
