Iga Swiatek valoró la mayor exigencia que existe actualmente en el circuito femenino justo antes de hacer su debut en el WTA de Roma 2023, torneo en el que busca su tercer título consecutivo.
Por vez primera en los dos últimos años, Iga Swiatek volvió a experimentar el amargo sabor de la derrota en un partido sobre tierra batida. La actual número uno del mundo claudicó en la final del WTA Mutua Madrid Open ante Aryna Sabalenka, viendo cómo la distancia entre ella y la bielorrusa en el ranking mundial cada vez se estrecha más.
Sin embargo, la polaca confía en darle la vuelta a la tortilla en el Internazionali BNL D’Italia. En el torneo de Roma Swiatek ya sabe lo que es ganar y por partida doble, habiéndose alzado con el trofeo de campeona en las dos últimas ediciones. En su comparecencia previa a su debut en el evento, la número uno mundial aseguró que el nivel medio del circuito WTA es cada día más alto y que, por lo tanto, no va a ser nada fácil conquistar nuevamente Roma pese a que se encuentra ante uno de sus torneos predilectos.
La exigencia del torneo en Roma
“Es duro, siempre es duro. No importa cómo sean las finales. El año pasado contra Ons (Jabeur) fue más ajustada de lo que el marcador reflejó. Recuerdo que fue un partido muy físico y en el que cualquier punto importaba. En 2021 estuve a punto de perder con Strycova aquí, creo que fue en cuartos de final. Claro que conservo grandes recuerdos de mis actuaciones en Roma, pero no espero que este torneo vaya a ser más fácil que los demás. Va ser duro, el resto del circuito juega cada vez mejor. Veremos cómo juego esta semana“, declaró una Swiatek cuya primera rival en la segunda ronda será la rusa Anastasia Pavlyuchenkova, finalista de Roland Garros 2021, una dura primera piedra de toque para la polaca, que no podrá sumar ni un solo punto más en el resto de la gira sobre arcilla.
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