El jugador francés venció al primer preclasificado Denis Shapovalov en tres parciales (6-4, 2-6, 6-4) por la segunda ronda del ATP de Estoril. El canadiense no consigue obtener buenos resultados sobre tierra batida y ya suma su segunda caída consecutiva en esta instancia. Por su parte, Moutet jugará los cuartos de final ante Albert Ramos.
Denis Shapovalov venía teniendo una temporada bastante irregular, donde por momentos ha mostrado un nivel prometedor, y por otros, uno muy lejano al que acostumbra tener. Más allá de alcanzar por ejemplo, las semifinales en Dubai, como mejor resultado del año, el canadiense no consigue elevar su confianza, sobre todo en torneos importantes. La deuda sobre tierra batida parece aún mayor, dado que nunca superó hasta aquí la segunda ronda en Roland Garros.
Corentin Moutet, por su lado, llegaba en un buen momento de su tenis, y en jugando en su superficie predilecta. Hace apenas algunos días logró una gran victoria en Barcelona ante Daniel Evans, más aún teniendo en cuenta que el britanico había eliminado a Novak Djokovic en Montecarlo. Esta semana, el galo debutó con triunfo en tres mangas ante Marcos Giron.
Shapovalov no consigue buenas sensaciones
El partido comenzó de manera bastante igualada, un interesante duelo entre jugadores zurdos, que buscaban tomar la iniciativa rápidamente. Shapovalov parecía más dispuesto a arriesgar con sus tiros, frente a un Moutet que se proponía a correr y luchar lo necesario. Luego de algunas chances de break sin concreción para el canadiense, el francés sí lo conseguiría en el séptimo juego. Moutet se adueñó del parcial por 6-4.
Esa frustración para el norteamericano, que no se siente cómodo jugando en tierra batida, sería el combustible para iniciar de otra manera el segundo set. Shapovalov logró quebrar en su primera oportunidad, generando una ventaja que no soltaría. Más allá de los intentos de Moutet, el canadiense igualó las cosas con un 6-2 contundente.
Lógicamente, por la diferencia de jerarquía, se esperaba que Shapo agrande esa diferencia. De hecho, el canadiense llegó a tener un 3-1 a su favor. Pero Moutet no bajó los brazos, y aprovechando algunos momentos de duda para su rival, concretó dos breaks seguidos para pasar adelante en el score. Finalmente, el francés se llevó la victoria sin volver a ceder su servicio.
