Serena Williams venció sin mayores complicaciones a la rusa Margarita Gasparyan en sets corridos (6-2, 6-4) y avanzó a la tercera ronda del US Open. La estadounidense que va en busca de su 24º título de Grand Slam, enfrentará ahora a Sloane Stephens.
La menor de las hermanas Williams llegaba al encuentro tras un debut con ciertas dudas en su rendimiento ante su compatriota Kristie Ahn, y sobre todo, luego de la floja imagen que dejó en el WTA de Cincinnati, cuando fue eliminada en tercera ronda por la griega Maria Sakkari. Por su parte, la rusa, muy afectada por las lesiones a lo largo de toda su carrera, venía de conseguir un buen triunfo en tres sets frente a la campeona olímpica Mónica Puig.
El historial entre ambas marcaba dos enfrentamientos con sendas victorias de la norteamericana en dos sets, también en torneos de Grand Slam (primera ronda de Wimbledon 2015 y octavos en el Australian Open 2016).
Gran actuación de Serena
El partido comenzó con una Serena muy sólida en su plan de juego, rápidamente conseguiría el primer break para tomar distancia en el marcador. El quinto game sería clave para la estadounidense, ya que logró salvar un punto de quiebre en favor de la rusa. Luego sí se concretaría un break por lado, que no modificarían el desarrollo del set. Williams terminó cerrando el parcial con un contundente 6-2 en 35 minutos, concediendo sólo tres errores no forzados en total.
La segunda manga tendría aún más irregularidad que la primera. Gasparyan comenzó a arriesgar en sus juegos de devolución, emparejando el duelo de fondo de cancha. Luego de eso, habría cuatro breaks en juegos consecutivos, promediando el parcial. La moscovita tuvo una oportunidad de quebrar en el noveno game que no podría conseguir, y Serena sí lo haría al siguiente juego para concluir el encuentro luego de casi dos horas en la cancha.
Próxima parada: Sloane Stephens
Por la tercera ronda, Williams estará enfrentando a la también estadounidense Sloane Stephens. Entre sí han jugado en seis oportunidades, con cinco triunfos de Serena. La única vez que ganó Stephens fue en los cuartos de final de Australia en 2013. El último antecedente data de Roland Garros 2015 con triunfo de Williams en tres sets, que también se llevó la victoria cuando se cruzaron en Flushing Meadows (2013).