La tenista bielorrusa explicó sus sensaciones tras recibir el trofeo que la acredita como la mejor jugadora de este 2024, siendo esta la primera vez que acaba un año en lo más alto del ranking mundial.
Sabalenka feliz por terminar el año como número uno de la WTA
Pese a caer en las semifinales de las WTA Finals frente a la estadounidense Cori Gauff, eventual campeona, no hay nada ahora mismo que le quite la sonrisa de la cara a Aryna Sabalenka. La tenista bielorrusa vio premiada su magnífica temporada recibiendo el trofeo que la acredita como número uno mundial a final de año, un logro que, por ejemplo, otras múltiples campeonas de Grand Slam como Venus Williams, Kim Clijsters, María Sharapova o Naomi Osaka jamás disfrutaron.
Una Sabalenka diferente
Ese parece ser el secreto de la bielorrusa para haber sido capaz de encontrar la tan ansiada consistencia en su juego reclamada durante sus primeros años de carrera.
«Diría que al principio no estaba preparada. No me sentía preparada para toda esa presión y expectativas. Pero ahora y después de todo por lo que he pasado, mentalmente, que siempre es lo más importante, me encuentro más que preparada. Creo que ahora tengo un mejor entendimiento de mi juego, mis armas y cómo manejar mejor las emociones. Si comparo a la Aryna de hace, no sé, dos o cinco años atrás, con la de ahora, creo que somos dos jugadoras completamente diferentes«, sostuvo la tenista de Minks en declaraciones recogidas por la web oficial de la WTA.
Una temporada desafiante pero con final feliz
Desde que se crease el ranking mundial contemporáneo, allá por 1975, solamente Serena Williams, Chris Evert y Mónica Seles necesitaron más Grand Slams (cuatro cada una) que Sabalenka antes de finalizar una temporada como números uno del mundo. La bielorrusa comenzó el año pisando fuerte, revalidando su título en el Open de Australia. Sin embargo, los siguientes meses fueron muy complicados para ella, tanto a nivel deportivo como personal (suicidio de su expareja).
Tras caer frente a Mirra Andreeva en los cuartos de final de Roland Garros, Sabalenka sufrió una inoportuna lesión en el hombro que la obligó a bajarse de Wimbledon y poner en jaque el resto de la temporada. En una controvertida decisión que al final se tornó en la más correcta, la centroeuropea decidió saltarse los Juegos Olímpicos de París 2024, sobre tierra batida, y no cambiar de superficie (cemento) de ahí a final de año.
El tiempo y los resultados demostraron el acierto de Sabalenka y su equipo, puesto que la bielorrusa se llevó 20 de sus 21 encuentros que disputó desde el torneo de Cincinnati, el cual conquistó junto al US Open y Wuhan. Sus dos triunfos en la fase de grupos de la reciente Copa de Maestras frente a Qinwen Zheng y Jasmine Paolini certificaron el primer puesto de Sabalenka a la cabeza del ranking WTA, con un récord global de 56-14 en victorias/derrotas, casi idéntico al 55-14 con el que finalizó 2023.
Estos datos no hacen más que dar la razón a la propia Sabalenka al afirmar que ahora se siente una jugadora diferente, con más determinación para aguantar en la cima todo el tiempo que pueda.