Andrey Rublev tuvo que sufrir mas de lo esperado, pero finalmente logró vencer a Federico Coria en tres mangas (7-5, 5-7, 7-6).
Sufriendo, pero avanzando de ronda. Así se podría describir el trinufo de Andrey Rublev ante Federico Coria en los octavos de final del torneo de Bastad, en un encuentro en donde el argentino vendió muy cara su piel ante un Rublev que no terminó de sacar su mejor versión a pesar del trinufo final en el desempate de la tercera manga y que le sirve para colarse entre los ocho mejores del torneo de Bastad.
El ruso llegaba al torneo de la ciudad sueca como el segundo cabeza de serie, lo que que ahorraba tener que disputar la primera ronda. Por su parte, Fede derrotó en tres sets a Delbonis y lo hizo tras un 0-6 en contra en el primer set. Ambos jugadores se medían por primera vez en su carrera, y con dos estilos bastante diferenciados. El tenista ruso comenzó el encuentro teniendo break de ventaja en dos ocasiones, aunque ambas fueron neutralizadas por el jugador argentino. Coria no tardó en sacar a relucir su juego intenso desde el fondo de pista para provocar los fallos de un Rublev que buscaba los puntos a las primeras de cambio, sin importar el resultado. El ruso llegó a servir para la primera manga con 5-4, aunque finalmente tuvo que esperar al siguiente turno de saque para cerrar el primer parcial por 7-5.
Rublev se lleva el triunfo
Coria se veía con un set de desventaja, aunque eso no hizo que bajara su nivel. Su nivel al servicio durante todo el segundo set fue muy bueno, y se limitó a esperar los errores de un Rublev que no encontraba sus golpes ganadores ante la solidez del argentino desde el fondo de la pista. Los juegos pasaron, y los nervios acabaron pro traicionar al tenista ruso en el momento clave del set y de esta forma Fede mandaba el partido al tercer parcial y con muchas posibilidades de vencer al ruso. Rublev no tardó en reaccionar, y sus golpes ganadores le dieron ventaja nada más comenzar el tercer set. Todo parecía controlado por el tenista ruso, aunque nuevamente los nervios le traicionaron cuando le tocó cerrar el encuentro con su servicio.
Los errores de Rublev le condenaron a tener que cerrar el encuentro en el tie-break ante un Coria que sabía que su juego de fondo podía ser clave en el tramo final del encuentro. Sin embargo, Rublev no acusó la presión en el desempate y logró sacar su calidad para terminar venciendo a un combativo Coria en tres mangas y de esta forma seguir vivo en el torneo de Bastad.
