Naomi Osaka sufrió un duro varapalo en el WTA 1000 de Cincinnati, donde no pudo pasar de la fase previa. Tras una dura derrota, la japones dio un emocionante comunicado en el que habló de las sensaciones tras el partido ante Elise Mertens.
Resultados WTA Cincinnati 2024
Naomi Osaka y una cruda reflexión tras la derrota
Naomi Osaka está volviendo a aparecer en los primeros planos del circuito WTA, luego de un largo parate tras ser madre por primera vez. La japonesa tuvo apenas un puñado de partidos a lo largo de la temporada, pero demostró que su tenis sigue estando ahí. Pese a las buenas sensaciones de los últimos meses, la nipona no la pasó nada bien en el WTA 1000 de Cincinnati. Allí Osaka no recibió invitación para el cuadro principal, por lo que tuvo que atravesar la fase previa.
Pese a una dura victoria en la primera ronda, Osaka cayó ante Elise Mertens y no logró entrar al cuadro principal. Este duro revés significó mucho para Osaka, que realizó un fuerte descargo en las redes sociales en las que habló sobre el mal momento que vivió y además dejó interesantes reflexiones antes de encarar el cuarto y último torneo de Grand Slam de la temporada 2024, el US Open, donde confirmó su asistencia.
El texto de la japonesa
«He estado tratando de averiguar cómo me siento durante las últimas horas. De alguna manera extraña, no he llegado a apreciar las derrotas; no se juega al tenis durante más de 20 años sin sufrir una buena cantidad de ellas. Se aprende de las derrotas y luego se espera con entusiasmo la próxima oportunidad para poner a prueba lo aprendido. Sin embargo, mi mayor problema en este momento no son las derrotas, sino que no siento que esté eso en mi cuerpo. Es una sensación extraña, fallar pelotas que no debería fallar, pegar más suave de lo que recuerdo. Intento decirme a mi misma ‘Está bien, lo estás haciendo bien, solo superalo y sigue esforzándote’, pero mentalmente es agotador. Internamente me escucho gritar ¡¿Qué diablos está pasando?!
No me malinterpreten, he jugado apenas algunos partidos este año en los que me sentí como yo misma y sé que este momento es probablemente solo una pequeña parte de las nuevas transiciones (arcilla, hierba, arcilla, pista dura, etc…) Sin embargo, la única sensación con la que podría comparar lo que siento ahora es con el posparto. Eso asusta porque he jugado al tenis desde los 3 años, la raqueta debería sentirse como una extensión de mi mano. No entiendo por qué todo tiene que sentirse casi como nuevo otra vez. Para mí, esto debería ser tan sencillo como respirar, pero no lo es y, sinceramente, no me había dado cuenta de ello hasta ahora.
Durante este tiempo me he preguntado qué quiero de toda esta experiencia y me di cuenta de algo. Me encanta el proceso (aunque a veces el proceso no me quiera a mi, jaja), esforzarme todos los días y, finalmente, tener la oportunidad de llegar a donde quiera estar. Sé que la vida no está garantizada, así que quiero hacer lo mejor que pueda con el tiempo que tengo. Quiero enseñarle a mi hija que puede lograr muchas cosas con trabajo duro y perseverancia. Quiero que apunte a las estrellas y que nunca piense que sus sueños son demasiado grandes.
Nada en la vida está prometido, pero me di cuenta que puedo prometerme a mi misma trabajar tan duro como pueda y dar lo mejor de mí hasta el final. Nos vemos en Nueva York«.
Comentar...