El canadiense y el helvético se miden en el partido estrella de la jornada de los cuartos de final. Este encuentro reeditará las semifinales del año pasado en las que Raonic salió victorioso en un partido que necesitó cinco mangas para decidir al ganador. Esta vez las cosas han cambiado y Federer es el gran favorito para convertirse en campeón del torneo.
En el último turno del día, alrededor de las 16:00 está previsto comenzar el partido que tiene a todos los focos del mundo del tenis pendientes de lo que pueda ocurrir. El suizo y el canadiense se miden por un puesto en las semifinales de Wimbledon en un partido, que puede ser trampa para el de Basilea. La última que ambos se enfrentaron fue en estas mismas pistas, en las semifinales del año pasado y se saldó con la victoria del gigante de Podgorica en cinco mangas. Las cosas han dado la vuelta y sin duda es Federer el que tiene todas las de ganar tras el nivel desplegado en el torneo, en el que ningún jugador ha sido capaz de robarle un parcial en el marcador.
Milos Raonic estaba cosechando una temporada un tanto irregular, sin brillar en la mayoría de torneos. El paso de la arcilla a la hierba ha beneficiado su juego, ya que es un gran sacador y ha sabido aprovecharlo a la perfección para gracias a su potente servicio plantarse en los cuartos de final. En los primeros cuatro partidos se deshizo de Struff, Ramos, Youzhny y Zverev. Con su servicio estuvo más o menos acertado, el problema lo encontró en la poca movilidad que tenía al resto que le permitió tener un número pésimo de bolas de rotura, decidiéndose gran parte de los sets en las muertes súbitas. La otra cosa clara que nos ha dejado en las primeras rondas es que le está costando entrar en los partidos, yendo su juego de menos a más en la mayoría de ellos, como en el de cuarta ronda ante el alemán al que le acabó pasando por encima en la quinta manga por un contundente 6-1.
Roger Federer es la inteligencia en persona. El suizo es capaz de ahorrar energía en la mayoría de los momentos del encuentro, pero cuando llega el juego clave quiebra a su rival para ir acercándose a la victoria. Ha superado todos los obstáculos con facilidad, incluidos los dos últimos como Mischa Zverev o Dimitrov que son jugadores especialistas en este tipo de superficies, pero que fueron incapaces de poner en apuros el juego del helvético. Federer está con ganas de volver a triunfar en el All Englad Club y es el favorito para levantar su octavo título en Londres.
LAS CLAVES
Pocas opciones las que tiene el canadiense o eso es lo que parece a priori. Raonic tendrá que mejorar dos puntos en su esquema de juego si no quiere pasar por la pista de forma rápida. Para empezar la efectividad en sus primeros servicios debe ser clave para ganar puntos de forma gratuita, ya que en los segundos saques el suizo podrá cortar la bola para presionar a su rival, al que no le guste nada agacharse para golpear esas bolas tan bajitas con efecto. Además tendrá que salir concentrado desde el primer momento, ya que contra Youzhny o Zverev fue de menos a más para acabar ganando a sus rivales, pero esto contra Federer no vale ya que conseguir una remontada ante el mejor jugador sobre la hierba es casi misión imposible.
Por su parte Federer sabe que con su servicio está difícil que le rompan. Por este motivo intentará presionar a su rival desde el resto, para que en algún momento lleguen las bolas de break que puedan poner tierra de por medio. Las opciones de Raonic pasan por mantener su servicio y llegar a las muertes súbitas en las que la fuerzas se igualan. Claramente el favorito es Federer con un 80% de probabilidades para ganar, mientras que las de su rival son sólo aproximadamente el 20%.
