El español ha sumado el primer triunfo en Winston Salem. Ramos ha dado un paso de gigante y se planta en octavos de final tras ganar a Millman (6-4, 6-4).
Albert Ramos debutaba como octavo cabeza de serie el martes en Winston Salem. El español venía de caer a las primeras de cambio en Cincinnati ante Fognini. Enfrente le esperaba un Millman que había dejado buenas sensaciones en el debut del torneo estadounidense frente al francés Hugo Gaston. En el cara a cara ambos se habían medido casualmente en este torneo en 2016 y la victoria fue para el australiano en tres sets.
Ramos se planta en octavos de final
El partido comenzó con ambos perdiendo su servicio. Tanto Ramos como Millman no tienen un gran servicio y es por ello que no tienen una gran garantía en sus saques. Desde ese momento en los intercambios parecía ser Ramos el que salía beneficiado en la mayoría de ocasiones. La solidez del catalán podía con el australiano. Gracias a otro break se marchaba hasta el 4-2. Desde ese momento no hubo ni una alternativa más al resto en toda la primera manga y ganando el décimo juego en blanco con su servicio Albert Ramos se llevaba el primer parcial por 6-4.
Nuevamente desde el inicio de la segunda manga era Millman el que parecía sufrir más con su saque. Ramos cada vez estaba encontrando más primeros servicios y tenía menos problemas. Gracias a ello pudo aprovechar la cuarta bola de break en el set para conseguir un break que tras confirmarlo le mandaba hasta el 5-3, a solo un juego de la victoria. Llegaron tres bolas de partido al resto, pero Millman salvó todas ellas para poner el 4-5 y pasar toda la presión al otro lado. Sin mayores problemas Ramos a la quinta bola de partido por 6-4 acababa certificando su primera victoria en Winston Salem para avanzar hasta los octavos de final y medirse a Mannarino o Ruusuvuori.