Cristina Bucsa fue superada ampliamente en el debut del WTA 500 de Queen’s. La tenista española no pudo hacer nada ante la británica Raducanu, cayendo con un abultado marcador de 6-1, 6-2.
Bucsa patina en la hierba de Londres
Luego de medio siglo de exilio, Queen’s volvía a formar parte del circuito WTA, ocupando la categoría 500. En esta nueva edición del torneo londinense, Cristina Bucsa (112°) debió jugar la clasificación, logrando el pase al cuadro principal. La española venía de ser campeona en el dobles de Birmingham junto a la australiana Destanee Aiava, sumando confianza en el césped británico. En la primera ronda de Queen’s, Bucsa se medía con la local Emma Raducanu (37°), quien recibió una wild card para disputar el torneo. La tenista británica aterrizaba en su país después de una dura derrota ante Iga Swiatek en la segunda ronda de Roland Garros.
Raducanu desprende sus virtudes y pega fuerte
El encuentro arrancó nivelado, con ambas tenistas sólidas en sus primeros turnos de servicio, sin sufrir contratiempos. De todos modos, la británica tomó el mando desde el tercer juego, destacando sus cualidades en el césped londinense. Ya en el cuarto juego Raducanu desplegó sus armas en el resto, desbordando a la española con cada golpe y marcando el primer quiebre del juego. Sin conceder puntos, la tenista local validó la ruptura, colocándose 4-1 en el score. Luego, la británica volvió a exponer sus habilidades, rompiendo el saque de Bucsa otra vez. Con dos quiebres en su haber, Raducanu mantuvo el impulso y cerró la primera manga con un cómodo 6-1.
La británica sostiene un gran nivel para arrasar con Bucsa
En el inicio de la segunda manga, la británica salió a buscar los puntos con la devolución, rebasando la defensa de la española y firmando un quiebre inmediato. Acto seguido, Raducanu se mostró firme en su turno de saque, ratificando la diferencia en el marcador. En el tercer game, Bucsa volvió a sufrir ante las condiciones de su rival, no pudo hacerse fuerte en su posición y cedió nuevamente el servicio. Sin titubeos, Raducanu se hizo cargo del saque, exponiendo sus dotes para agrandar la diferencia. Más allá de las intenciones de Bucsa, la jugadora local no mostraba debilidades en su tenis. Finalmente, la británica sacó provecho de la ventaja, ganando el duelo con en sets corridos (6-1, 6-2).