El argentino estaba cerca del triunfo cuando llegó la lluvia. Navone acabó pagando muy cara esa pausa que benefició a un Nuno Borges que logró la remontada (4-6, 7-5, 6-4) y está en cuartos de final de Auckland.
La lluvia deja a Navone sin su victoria en Auckland
Un nuevo desafío para Mariano Navone en este ASB Classic luego de un auspicioso debut frente a Adrian Mannarino, firmando así su primera victoria del 2025 tras una temprana caída en Brisbane la semana previa. El argentino vive una semana muy especial en su carrera al haber sido convocado por primera vez para la Copa Davis, de cara a la serie frente a Noruega. Grandes chances de seguir escalando en el ranking las que tiene el de 9 de julio, sabiendo que también tendrá unos cuantos putntos que defender en esta temporada.
En este partido de segunda ronda, el rival era el siempre peligroso Nuno Borges, un jugador algo irregular pero que ya ha demostrado que puede ser un hueso duro de roer en una buena semana, como lo demostró el año pasado en el Open de Australia, alcanzando la cuarta ronda. En este torneo de Auckland, el luso superó a Luciano Darderi en su debut.
Valiosa diferencia para el argentino
Los primeros juegos del partido traían la lógica paridad de los comienzos entre tenistas de un nivel similar, casi como en una pelea de boxeo, midiéndose poco a poco para buscar el punto débil en el juego de su rival. Tras mantener su saque en cero, Navone iba a pegar primero en la tarde neozelandesa, con un quiebre en el quinto juego para ponerse 3-2 arriba. Esa diferencia parecía durar muy poco y es que Borges lograba recuperar la rotura casi de manera inmediata, dejando todo igualado por 4-4, pero allí iba a aparecer la garra argentina para seguir dando pelea desde la devolución. Un nuevo quiebre para Mariano le iba a permitir cerrar luego el set inicial por 6-4.
Borges pone las tablas
Todo parecía simplificarse repentinamente para el argentino en el inicio de la segunda manga, con un nuevo quiebre a su favor para volver a tomar las riendas del marcador ante un Borges impreciso y lleno de errores no forzados, aunque también unos cuantos forzados por la consistencia que proponía Navone. Sin embargo, el portugués no quiso dejar escapar al argentino en los números y consiguió recuperar el quiebre inmediatamente. Una historia de muchísima paridad, con un Mariano que lograba sacar adelante cada turno de servicio a pesar de verse siempre en desventaja en el marcador.
Al servicio del de 9 de Julio en el 4-5, apareció un invitado sorpresa en la pista de Auckland: la lluvia. Este parate de unos cuantos minutos, obligó a los jugadores a ir al vestuario hasta que pudieran secar completamente la superficie y seguir con las acciones en este momento clave. Tras la reanudación del partido Borges aprovechó ese parón y con mejores sensaciones era capaz por 7-5 de acabar forzando el set definitivo que iba a decidir al ganador.
El portugués termina con la ilusión argentina
La tercera manga estuvo pareja. Es cierto que Borges salió con un punto más de acierto y se escapaba hasta el 2-0, pero una gran reacción del argentino ponía el 2-2. Desde ese momento Borges llevó la iniciativa en el marcador. Ninguno de los dos daba su brazo a torcer pero a pesar de que Navone parecía tener serias opciones de llevarse el partido, tras el 5-4 el portugués encontró con una bola de partido. Una gran subida a la red le permitió ganar con su volea de derecha el duelo y dejar a Navone eliminado a pesar del gran encuentro que había hecho el argentino hasta antes de la llegada de la lluvia.