Crónicas

Con el corazón en la mano: Fils escapa del abismo y supera a Munar en una increíble batalla en París

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Arthur Fils pegando de derecha | Foto: Barcelona Open Banc Sabadell

Arthur Fils dio toda una demostración de carácter jugando como local. Tras más de cuatro horas y limitado físicamente, pudo vencer a Jaume Munar por 7-6 (3), 7-6 (4), 2-6, 0-6 y 6-4 en la segunda ronda de Roland Garros. El español estuvo 3-1 arriba en el decisivo, pero no pudo sostenerlo.

Fils derrota a sus dificultades físicas y a Munar para seguir con vida en Roland Garros

La búsqueda de Jaume Munar por seguir avanzando en Roland Garros tenía un obstáculo más que complicado en la segunda ronda: debía enfrentarse al local Arthur Fils. Las premisas que buscaba cumplir el español eran inéditas para él. Por un lado, superar esta instancia en París y por el otro, ganarle a su oponente de hoy, con quien estaba 0-2 abajo en el historial.

El debut de Munar había sido con una sólida victoria sobre Camilo Ugo Carabelli en sets corridos. Después de una gira de tierra batida que al principio no había sido demasiado satisfactoria, sus sensaciones habían mejorado con la actuación en el Foro Itálico, donde pudo meterse en los octavos de final. Tras cuatro derrotas en segunda ronda en la capital francesa, hoy buscaba avanzar más lejos que nunca.

Para Fils la historia no era muy distinta dado que hasta esta semana, donde venció a Nicolás Jarry en la primera ronda, nunca había podido ganar un partido en el segundo Grand Slam del año. Todo era tierra nueva para él y sus antecedentes en el 2025, donde alcanzó los cuartos de final en Indian Wells, Miami y Montecarlo, sumando las semifinales en Barcelona, eran prometedores.

Fils se queda con la batalla del primer set

Munar comenzó tomando la delantera en el partido, con un quiebre en el primer game. El español mostraba buena movilidad y distribución de sus tiros para incomodar a Fils, que estaba muy errático en ese pasaje inicial. Ese 2-0 pudo ser 3-0 con un segundo quiebre que no llegó, con el francés otorgando tres bolas de break pero pudiendo salir a duras penas airoso de ese momento.

La diferencia de un quiebre se mantuvo hasta el sexto juego, momento desde el cual Fils comenzó a calibrar mejor su derecha. Más cómodo y tomando posiciones dentro de la pista, pudo recuperar el break y el partido se tornó muy luchado y con buena intensidad desde el fondo de la cancha por parte de los dos. Las cosas llegaron bien peleadas hasta el tiebreak, donde Fils presionó más, encontró algunos errores de Munar y pudo ganar el set por 7-6 (3).

El francés sigue firme y toma el segundo

Luego de una pulseada sin cuartel que fue el primer parcial, la tendencia de paridad siguió en el arranque del segundo. Juegos largos, rallies disputados y sobre todo un Fils que tomaba la iniciativa y tiraba más, tratando de imponer las condiciones, pero se encontraba con la tenacidad de Munar, que contenía y también buscaba sus momentos para desequilibrar. En esa tónica, el francés tuvo una bola de break que no pudo tomar en el quinto juego, pero por lo demás fue todo muy parejo.

El tramo final del set tuvo muchas emociones y cambios en el marcador. Fils caminó por la cornisa en el octavo game, donde se salvó de un 15-40 y, dando un golpe de efecto, consiguió un quiebre que lo dejó sacando para el parcial 5-4. Sin embargo, no pudo aprovechar esa situación y la reacción de Munar volvió a desembocar en un desempate. Allí, el galo capitalizó el escenario y pudo establecer una diferencia de dos sets al ganar este por 7-6 (4).

Munar reacciona y aprovecha sus chances en el tercero

Venía siendo un partidazo y la pulseada se mantuvo en la parte inicial del tercer set. Allí hubo un pasaje con tres quiebres consecutivos, donde Munar tomó la primera ventaja y si bien no pudo confirmar en el cuarto game, sí lo haría en el sexto para ponerse 4-2 por delante. Fils solicitó atención médica y se veía algo afectado, pero el español no mostró piedad.

De manera inmediata, el número 57 del mundo volvía a generar y a tomar un nuevo break para construir la primera brecha tan amplia por parte de ambos en un encuentro que había sido muy cerrado. Así, manteniendo en cero Munar no dejó duda alguna de que seguía vivo en el partido y capturó el tercer set por 6-2 para alargar la definición y achicar la diferencia.

El español se mantiene concentrado ante un rival inmóvil

Las molestias físicas de Fils se agudizaron en el arranque del cuarto set y como consecuencia de ello intentó acortar más los puntos. Sin embargo, los problemas para afirmarse lo hacían caer en errores en sus impactos, mientras que en otras ocasiones se encontraba con la respuesta y la defensa de Munar que al moverlo lo anulaba. De esa forma, el español tomó dos quiebres rápidamente y se escapó con un 4-0.

Desde ahí nada cambio en la cuarta manga, Fils directamente jugaba quieto. Apostaba los cartuchos que parecían quedarle a la idea de poder definir los puntos en uno o dos manotazos. Munar fue inteligente y se mantuvo dentro del libreto, pasando bolas, moviéndolo hacia los costados y también con el factor sorpresa de las dejadas. El resultado de esto fue obvio: un tercer quiebre y una nueva confirmación para el 6-0 ante un estado enmudecido.

Fils revive y gana un partidazo

En medio de un clima de incertidumbre y con el público local tratando de levantarlo, Fils salió a dejar todo lo que le quedaba. A puros tiros ganadores se llevó el primer game, el único del partido que hasta ese momento pudo ganar en cero. Era un momento clave en lo emocional, pero Munar lo pudo gestionar con seriedad. Saldría rumbo a ese descanso con un quiebre de ventaja y confirmaría luego para el 3-1.

La reacción de Fils llegó empujada por lo mental. No tenía piernas, pero jugaba con el corazón y asumiendo una postura super ofensiva recuperó el quiebre y metió tres juegos en fila para ponerse 4-3. Las cosas parecían inclinarse a su favor hacia la zona decisiva, en la que Munar salvó un 15-40 en el octavo game, para evitar que su adversario quede sacando para partido. La tensión era abrumadora.

Después de eso le tocó al francés vivir una situación apremiante: en el 4-4 estuvo 0-40 y salió de cinco break points jugándose todo a una derecha que estaba afiladísima. Era 5-4 y toda la presión recaía sobre Munar, que tenía que combatir el asedio de las tribunas y la mentalidad de hierro que estaba mostrando su rival. El final fue de película: con su presión, Fils encontró los errores del otro lado y pudo conseguir el quiebre que le dio la victoria por 7-6 (3), 7-6 (4), 2-6, 0-6 y 6-4 en más de 4 horas de partido para seguir con vida en Roland Garros.

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