El tenista alemán es el nuevo campeón del Challenger de Turín al vencer en dos mangas al francés Quentin Halys (7-6, 6-3). Moraing suma de esta manera el quinto trofeo en el circuito Challenger.
Mats Moraing puede sonreír esta semana. El espigado tenista germano ha hecho valer su buen servicio en estas pistas rápidas bajo techo en Turín para alzarse con un nuevo título Challenger, el primero en este año 2022 y su primer título desde Tulln 2021. Moraing se ha impuesto a un Halys Que venía de coronarse la pasada semana en Pau, pero que esta vez no ha podido imponer su tenis ante el buen hacer del germano con su servicio.
Ambos llegaban a la final en tendencias ciertamente opuestas. Halys llegaba tras sufrir bastante en sus partidos previos, mientras que Moraing llegaba dejando muy buenas sensaciones con su saque y aprovechando cualquier mínima oportunidad para ganar partidos a base de servicios. Y el partido ha seguido este mismo guión, con ambos jugadores mostrándose muy cómodos con su saque en el primer parcial y con un Moraing aprovechando la única concesión del francés para llevarse la victoria.
Moraing sale campeón
El primer set se ha decidido en un tie-break no apto para cardíacos al que se ha llegado tras el buen hacer de los dos jugadores con su servicio en toda la primera manga y sin ceder prácticamente pelotas de break en contra. Los saques directos han sido una constante entre estos dos bombarderos, y más en unas pistas tan rápidas como Turín en donde es muy difícil romper a buenos sacadores. Moraing ha terminado llevándose el tie-break tras salvar varias pelotas de set con su servicio y aprovechando un despiste de Halys en la muerte súbita se ha impuesto por 13-11 en el desempate.
El jugador alemán iría manteniendo su ventaja al inicio del segundo set gracias a su buen hacer con su servicio y aprovechando su condición de zurdo para conectar golpes ganadores con su derecha. Halys también seguía su camino y ambos jugadores parecían encaminarse a otra muerte súbita en el segundo set, sin embargo el francés ha cedido su servicio a mediados del segundo set y eso lo ha aprovechado Moraing para soltarse con su poderosa derecha y a partir de ahí controlar el partido con su saque hasta finalmente cerrar el partido y coronarse de esta forma campeón del Challenger de Turín en unas pistas que le vienen como anillo al dedo a un jugador que no duda lo más mínimo en jugarse golpes ganadores al resto para luego ir manteniendo las ventajas con su poderoso servicio. Turín es tierra de Mats Moraing.