El ruso estará en los octavos de final tras la retirada de Kevin Anderson en el tie break de la primera manga (6-6(5-2) ret). Medvedev sigue ganando confianza de cara a las rondas finales. El próximo rival del moscovita será De Miñaur o Sonego.
Daniil Medvedev llegaba a París con muchos focos sobre su figura. El ruso estaba decepcionando con sus resultados desde el parón. En cambio en unas declaraciones previas a su debut en el último Masters 1000 de la temporada dejó claro que estaba dispuesto a llegar lo más lejos posible en París y que no estaba presionado por sus últimos resultados. Le esperaba un duro debut frente a Kevin Anderson. Así es el tenis y es que hace solo unos días el sudafricano y el ruso se enfrentaron en cuartos de final en el ATP 500 de Viena. Kevin fue superior y sorprendió a uno de los favoritos al trofeo.
Nuevo enfrentamiento entre ambos en París. El moscovita volvía a ser favorito en un partido entre dos grandes sacadores. Se esperaba que hubiera pocas alternativas de break pero el ruso supo cómo encontrarlas desde el inicio. Anderson tuvo que que salvar situaciones límite en su segundo y tercer turno se servicio. Un total de cinco bolas de break que tuvo que levantar para seguir llevando la iniciativa en el marcador. Luego era Medvedev el que estaba contra las cuerdas, pero al igual que su rival salió airoso.
Con el 6-6 la primera manga se decidió en el tie break. Medvedev tomaba las riendas y Anderson con muy lastrado físicamente tuvo que retirarse del partido en beneficio de su rival. El ruso llegará a los octavos de final sin mucho desgaste físico, algo que le puede beneficiar de cara a estos partidos importante en las rondas finales. Ya sabe que De Miñaur o Sonego serán sus próximos rivales.
