En una nueva entrega de ATP Al Descubierto, el joven tenista canadiense de 19 años revela los secretos de su éxito a tan temprana edad, su pasión por el tenis desde que tenía uso de razón y su deseo de servir de inspiración para los más jóvenes.
Respeto, humildad y trabajo duro. Esas son las tres claves en las que se sustenta la vida profesional y personal de Félix-Auger Aliassime. El ‘Next Gen’ canadiense de 19 años es el protagonista de una nueva entrega de ATP Al Descubierto, donde deja claro que, pese a su edad, su grado de madurez es bastante más alto de lo que debería ser normal para un chico tan joven.
El actual número 20 del mundo ha tenido que convivir con la presión y las altas expectativas desde el primer momento en el que empuñó una raqueta, pero eso sólo ha tenido efectos positivos, aumentando su ética de trabajo y su concentración en el tenis. Otro de sus objetivos es servir de ejemplo a los más jóvenes, recalcando las recompensas que la vida te puede dar si vas en una buena dirección.
Servir de inspiración a las jóvenes generaciones
“Dentro de algunos años, la gente me conocerá y probablemente sabrá que yo siempre quise ser un buen ejemplo para las generaciones venideras. Quiero servir de inspiración para todos aquellos niños que quieran dedicarse al deporte, pero más allá de eso, lo que me gustaría es ser un buen ciudadano. Si tienes ese pensamiento en tu cabeza y lo pones en práctica cada día, probablemente tendrás recompensa”.
Toda su vida unido al tenis
“Sabía que quería ser tenista profesional desde los siete u ocho años. Ahora, simplemente estoy viviendo un sueño. Nunca he pensado en hacer otra cosa, lo que no deja de ser algo raro para un chico de mi edad. Veo a algunos de esos chicos y todavía no tienen ni idea de lo que van a ser de mayores. No existía ninguna garantía de poder lograrlo, obviamente, pero al mismo tiempo nunca dudé de mí mismo ni de lo que quería hacer. Desde el día en que decidí dedicarme al tenis, no he vuelto a mirar atrás”.
Gestión de las expectativas a tan temprana edad
Las altas expectativas siempre han ido unidas a la carrera de Aliassime, que con solamente 14 años ya logró su primer punto ATP tras clasificarse para la fase final del Challenger de Drummondville. En su siguiente torneo, en Granby, también superó la fase previa y ganó dos partidos del cuadro principal. Todos los ojos estaban puestos en él.
“Me sentí muy afortunado de poder alcanzar dichos resultados cuando todavía era muy joven. No es lo mismo según el jugador que seas, pero siempre he tenido que manejar grandes expectativas en torno a mí mismo desde que era muy joven. Lo más duro era estar arriba en el ranking, con 16 o 17 años, pero a veces perder en Challengers o en otros torneos que anteriormente había ganado o no ser capaz de hacer cosas normales de un chico de mi edad que los demás si podían hacer”.
Dar el máximo siempre
Pero nada de eso desanimó a Auger-Aliassime. Al contrario, le hizo motivarse y concentrarse aún más en el tenis. Los resultados le han dado la razón, comenzando el 2019 fuera de los cien mejores del mundo y finalizando ese mismo año en el top20 del ranking. Hasta ahora, el canadiense ya ha disputado cinco finales ATP y una semifinal de un Masters 1000, el de Miami 2019.
“Creo que soy el tipo de jugador que se deja el alma cada vez que sale a pista. Intento involucrarme completamente en todo lo que hago cada vez que entro a una cancha. Como solían decir mis padres, todo lo que haces sólo vale la pena si das el 100%. Si no haces esto último, será mejor que no lo intentes”.