Dos semanas increíbles para Barbora Krejcikova que logró ganar también el título de dobles femenino de Roland Garros junto a su compatriota y amiga Katerina Siniakova. Derrotaron en la Philippe Chatrier a Bethanie Mattek Sands e Iga Swiatek por un 6-4, 6-2.
Había mucho morbo para presenciar esta final ya que se enfrentaban las dos últimas campeonas del cuadro individual de Roland Garros. Sin embargo las que ya fueran finalistas en el Open de Australia donde sucumbieron ante Aryna Sabalenka y Elise Mertens, cosecharon su tercer título de Grand Slam en cuatro finales disputadas para volver a saber lo que es levantar el trofeo Simone Mathieu tres años después de que estrenaran su palmarés en este mismo escenario.
Krejcikova entra en el selecto club de jugadoras que han ganado el cuadro principal de Roland Garros tanto en individuales como en dobles. Se convierte en la séptima jugadora dentro de la Era Open después de que lo hubieran conseguido Billie Jean King (1972), Margaret Court (1973), Chris Evert (1974 y 1975), Virginia Rucini (1978) Martina Navratilova (1982 y 1984) y Mary Pierce (2000). Con lo cual con la dificultad que esto conlleva, la jugadora checa entra en la historia por la puerta grande gozando a sus 25 años de su mejor nivel de tenis.