La pareja formada por la japonesa y el alemán se llevan la modalidad de dobles mixto tras vencer a Venus y Andreescu.
La final del cuadro de dobles mixtos en Roland Garros traía un partido de lo más interesante para conocer a los campeones de esta modalidad este año. Miyu Kato y Tim Puetz llegaban a la final sin perder un solo set y rodeados por la polémica de Kato en el dobles femenino. Bianca Andreescu y Michael Venus llegaban llegar al set definitivo en tres de sus cuatro partidos sufriendo mucho. El cara a cara entre ambas duplas se estrenaba con este partido en el que la suiza y el neozelandés eran favoritos.
Bianca y Michael se adelantan
El partido comenzó con la japonesa y el alemán quebrando en el primer servicio del partido para comenzar con ventaja el partido. Las bolas de rotura se sucedían, pero consiguieron mantener la ventaja seis juegos más, momento en el que sus rivales rompieron para poner las tablas. Por si fuera poco, aprovecharon las dudas generadas para hacer lo mismo en el siguiente servicio y llevarse la manga por 6-4. Kato y Puetz acusaron mucho el golpe de perder la ventaja y se ponían por debajo en el marcador rápidamente.
Tim y Miyu remontan
Si el primer set se rompió desde el comienzo este fue todo lo contrario, con una gran igualdad hasta los compases finales del parcial. Ambas parejas guardaban sus servicios en una estrategia que parecía gustar menos a la canadiense y el neozelandés, que tuvieron dos oportunidades para romper y cerrar el partido. Sin embargo, en el noveno sucedió todo lo contrario y tras tres bolas de quiebre Kato y Puetz se daban la posibilidad de cerrar con su saque. No fallaron y tras una volea cruzada de revés picada de la japonesa el set iba para su casillero.
Desempate
El tie break a 10 puntos definiría a los ganadores del certamen tras una final realmente igualada. Tras cuatro puntos, el desempate se volvió loco y tras cuatro roturas seguidas el alemán y la nipona obtenían una ventaja de 6-3. Poco más pudieron hacer Andreescu y Venus, que arrebataron un punto al saque de sus rivales, pero la distancia era mucha. Finalmente, Michael mandaba una derecha a la red para darles el título a sus rivales y culminar una semana de altibajos para Kato.
