Luego de dos derrotas duras para el tenis argentino, el dobles compuesto por Máximo González y Andrés Molteni buscaban evitar el 0-3. En un duro partido, los argentinos evitaron la catástrofe y cerraron el día con una victoria.
Argentina le agradece al Dobles en la Copa Davis
El equipo argentino de Copa Davis, comandado por Guillermo Coria, buscaba evitar la catástrofe ante Canadá. Luego de las derrotas de Francisco Cerúndolo ante Denis Shapovalov y Sebastián Báez ante Félix Auger-Aliassime, el dobles buscaba la recuperación. Máximo González y Andrés Molteni, una pareja consolidada en el circuito de dobles de la ATP, se medían ante Shapovalov y Vasek Pospisil, la carta de Canadá para dar el golpe.
Los canadienses empiezan firmes
El partido no iba a comenzar de la mejor manera para la pareja argentina. González empezaba con dudas al servicio, entregando su saque sin demasiada resistencia. Por su parte, Pospisil y Shapovalov apelaban a los errores de los argentinos para tomar distancia y así iban a ponerse por delante en el marcador. Los argentinos no pudieron encontrar chances para volver a meterse en el partido y para colmo, en el séptimo juego iban a sufrir un quiebre letal. Canadá iba a cerrar el primer set sin demasiados problemas, por 6-2 y tomaba el control del partido.
Los argentinos vuelven al partido
Ya en el segundo parcial la historia iba a cambiar para Molteni y González. La dupla argentina mostraba seguridad, algo que no había aparecido en la primera manga y dejaban la responsabilidad en los canadienses, que no supieron estar a la altura de la situación. Esto provocó que Shapovalov y Pospisil tengan errores con el servicio, algo que se iba a materializar en un quiebre para los argentinos en el cuarto juego. Gracias a esa diferencia, Molteni y González cerraron el set por 6-3 y estiraban todo a un tercero.
Molteni y González le dan una sonrisa a Argentina
En el set final los argentinos iban a mostrarse muy seguros. Molteni levantó su nivel en la red y González acompañaba con autoridad en el servicio y en el fondo de la pista. Así fue como en el cuarto juego encontraron un quiebre que podía ser la llave para cerrar el triunfo. Desde ahí, los argentinos mostraron su mejor versión, anulando por completo el juego de los canadienses. Con otro quiebre en el séptimo game, Argentina encaminaba la victoria al ponerse 5-2. Con su servicio, Molteni mostró autoridad y los argentinos vencieron por 2-6, 6-3 y 6-2.