Cristian Garín derrota a Stan Wawrinka (6-4, 6-7 (9), 6-3) en una gran primera ronda en Viena. El chileno firma un partido bastante bueno, que tuvo en su mano para ganar en el segundo set, pero acabó ganando finalmente en un tercero en el que Stan se vino abajo. En los octavos del jueves, Dominic Thiem.
Cristian Garín y Stan Wawrinka se encontraban en la pista por segunda vez en sus carreras. El único precedente había sido en la segunda ronda de Roland Garros 2019, en la que el suizo machacó al chileno, cediendo tan solo 5 juegos en tres sets. Ahora, con Garín mucho más maduro, y en el número 22 del ranking ATP, tendríamos, seguro, un partido mucho más igualado.
El chileno llegaba al torneo de Viena con pocos torneos jugados desde la reanudación del circuito. El de Arica volvió perdiendo en la primera ronda de Cincinnati y la segunda del US Open, dejando muy malas sensaciones. Su gira de tierra tampoco sería extraordinaria, perdiendo en Roma a las primeras de cambio, llegando a semis en Hamburgo, y cayendo en tercera en Roland Garros.
Wawrinka, en cambio, decidió, por precaución, saltarse la gira americana. Volvería en la de tierra, jugando Roma y Roland Garros, sin obtener grandes resultados. Después de eso, a diferencia de Garín, comenzaría su gira indoor antes que el chileno, en San Petersburgo, donde no conseguiría un gran nivel, y cedería ante Denis Shapovalov en los cuartos.
Nos esperaba un partido interesante, con dos jugadores alejados de su mejor nivel, pero capaces de lo mejor en la pista.
Garín se enredó en el segundo, pero fue mejor que Wawrinka en todo momento
El partido comenzó con un Cristian Garín mucho más decidido. El chileno rompía de inicio en el primer set, y mantendría sus servicios con pasmosa facilidad, hasta cerrar la primera manga por 6-4, desbordando a Wawrinka, que estaba peor de lo que decía el marcador.
En el segundo llegó la calma. Tanta, que no se vieron bolas de break en los primeros 9 juegos del parcial. En el décimo llegarían, y lo harían en forma de bolas de set para Wawrinka. Serían las tres primeras de las ocho totales de las que dispondría el suizo, que, en el tiebreak, después de ir perdiendo 1-4 con doble minibreak, remontaría, hasta ganarlo por 11-9 sin conceder bolas de partido.
En el tercero, volvió la mejor versión del mejor jugador en la pista. Cristian Garín rompía de inicio, y, con servicios fáciles para ambos lados, en un set sin mucha historia, ese break sería suficiente para el latino, que cerraría por 6-3.
Ahora, a sufrir ante Thiem
Cristian Garín tendrá ahora otro encuentro difícil para continuar en Viena. Más, si cabe, porque será Dominic Thiem quien se mida al chileno en los octavos de final del jueves. Un partido nada fácil, pero esperado en un cuadro tan exigente como el vienés.
Por lo pronto, Cristian Garín, en los octavos del ATP 500 de Viena.
