En declaraciones recogidas por la página web oficial de la ATP, el chileno compartió confidencias con sus seguidores acerca de su experiencia durante este período de cuarentena provocado por la pandemia mundial del coronavirus.
Lamentablemente, la crisis del coronavirus ha cortado momentáneamente la progresión de muchos tenistas del circuito, tanto masculino como femenino, que estaban alcanzando el pico en sus respectivas carreras profesionales. Uno de los más afectados ha sido el chileno Cristian Garín, ubicado actualmente en el puesto 18 del mundo y que venía de proclamarse campeón en el ATP 500 de Río de Janeiro. Desgraciadamente y como el resto de sus compañeros, el de Santiago de Chile se ha visto obligado a confinarse en casa a la espera de una posible reanudación de la competición que cada día que pasa parece más improbable. De esta nueva situación y sus consecuencias habló en primera persona en declaraciones a la web oficial de la ATP.
Aspectos positivos del lugar en el que reside
«El tiempo de confinamiento se me ha hecho bastante largo y difícil en casa de mis padres. Pero esta semana ha cambiado algo. El pasado lunes se levantó la cuarentena en la zona en la que vivo tras veinte días encerrados. Lo he aprovechado para hacer un poco de deporte con mi familia, cada uno con su rutina particular. En mi caso, hice un recorrido de más de una hora en bicicleta. Uno de las mejores cosas de Santiago es la gran cantidad de paisajes lindos que tiene. Si la situación se alarga, supongo que tendré la oportunidad de visitarlos. También pude jugar una hora el tenis, algo que no había vuelto a hacer en un mes. Fue muy lindo regresar a la cancha«.
Máxima precaución ante todo
«Las pocas veces que he salido lo he hecho con cuidado, siendo súper riguroso y tomando las medidas oportunas ya que estamos en una situación muy delicada. Si me cuido a mí mismo, también lo haré con las personas a las que más quiero, evitando enfermar y contagiar a otros. Por eso, tras entrenar un poco fuera rápidamente regreso a casa para seguir protegiéndome del virus. No es algo que haya pasado frecuentemente en la historia, hay que tomar todas las precauciones«.
Un año de su título en Houston
«Fue el martes pasado. Mucha gente me felicitó y otros me mandaron fotos. Siento como si ya hubiera pasado mucho más que un año, quizá por todo lo que está pasando ahora. Ese día vi un vídeo de cómo lo logré y recordé lo especial que fue. El torneo, sus gentes, la ciudad, todo ello me encantó mucho. Estados Unidos, en general, es uno de los lugares donde más disfruto jugando. Ese título me dio mucha confianza para el futuro».
Más momentos especiales en su carrera
«Con el de Houston, son tres los mejores momentos que he vivido en una pista de tenis. Los otros dos son los cuartos de final en París-Bercy y el título en Río de Janeiro. Este último año ha sido muy bueno, competí a un nivel muy alto en todas las superficies. Tuve un gran rendimiento y fui capaz de jugar de tú a tú contra los mejores. Sumé casi 900 puntos en sólo dos meses de 2020, eso me deja tranquilo y muy contento».
El top10, al alcance
«Estos resultados son los que te proyectan de cara al futuro y te dejan en una buena posición. El top10 es una meta, un sueño. Creo que estoy cerca (665 puntos le separan de Goffin, el último en la lista). No creo que sea exagerado soñar con eso. Es una lástima que haya ocurrido todo esto del coronavirus».
Incertidumbre ante la situación actual
«Ahora lo que más quiero es volver a jugar al tenis, porque sin torneos no se puede hacer nada. No saber cuándo regresaremos, eso es lo que más me preocupa, lo que me tiene más intranquilo. Extraño mucho cada semana que pasaba en el circuito, los torneos importantes en juego. Soy competitivo por naturaleza y, de hecho, eso es lo que más echo de menos durante esta cuarentena».
Más tiempo para distracciones
«Muchas veces he intentado distraerme con videojuegos, algunos en la Play Station pero la mayoría en el ordenador. He jugado mucho a League of Legends. Lo hago en modo online con mis amigos durante los fines de semana, aunque sin apostar ni nada por el estilo. También he hecho otras cosas como, por ejemplo, cocinar una tarta de queso y algo de pasta. Me quedaron bien y creo que voy a ir a mejor».
«También he aprovechado para leer algunos libros. Ya terminé uno de Brad Gilbert, Winning Ugly. Ahora estoy con otro que me recomendó mi novia: El Alquimista. He visto algunas series como La Casa de Papel. Me gustó, aunque no me identifico con ningún personaje. También muchas películas, alguna sobre la Fórmula Uno que me encantó».
Aprender a valorar mucho más todo
«Al pasar uno mucho tiempo encerrado piensa más de lo normal. Siento que voy a valorar mucho más mi profesión cuando regrese. Por otro lado, me encanta aprovechar el tiempo en familia, cosa que no es habitual cuando uno no para de viajar y jugar mucho. Compartir comidas y charlas con ellos está siendo muy especial».
«Me estoy acostumbrando a un nuevo ritmo de vida. Ahora como algo menos, no tengo tanta hambre al no gastar tanta energía. Al principio, estando encerrado en casa, sentía que no hacía casi nada y terminaba con mucha energía acumulada. Yo soy de las personas a las que les encanta salir, hacer planes y eso. Lo extraño, pero cuando todo vuelva a la normalidad, voy a valorar mucho más cada momento de mi vida«.
