Tomás Etcheverry consigue dar el golpe ante el neerlandés Tallon Griekspoor en sets corridos (6-4, 7-6(4)) en su duelo por la segunda ronda del ATP Masters 1000 de Toronto. El argentino irá contra Munar o Cerúndolo en la tercera rueda.
Etcheverry encuentra su nivel en Toronto
Un nuevo desafío para Tomás Etcheverry en este National Bank Open luego de sacar adelante un durísimo partido de primera ronda ante el francés Pierre-Hugues Herbert. El tenista platense viene de hacer modificaciones en su equipo de trabajo tras anunciar su fin del vínculo con Horacio De la Peña, en una temporada con más cosas negativas que positivas, saliendo incluso del Top 50 después de varios años. Del otro lado de la red, el vigesimocuarto sembrado del torneo, Tallon Griekspoor, que debutabá con este partido, con la necesidad de adaptarse bien rápido al cambio de superficie tras haber disputado los cuartos de final en Bastad el pasado jueves.
Gran inicio de Tomás
Un contundente comienzo de partido para Etcheverry, sacando máximo provecho de ya venir compitiendo en la superficie, ante un rival que apenas disputaba sus primeros puntos en cemento desde Indian Wells. El argentino concretaría dos quiebres consecutivos para colocarse 3-0 arriba en los números, y si bien Griekspoor recortaría esa diferencia, se mantenía al frente. Algunos pasajes de dudas al servicio tanto en el 4-3 como en el 5-4, teniendo que sacar adelante juegos con puntos de quiebre en contra, pero aún así, el platense se las arreglaba para llevarse el primer parcial por 6-4.
Cierre por la vía rápida
Mucho más acorde a lo esperado iba a ser el desarrollo del segundo parcial, con un Griekspoor que poco a poco conseguía mejores sensaciones en su saque, manteniéndose en el ritmo del argentino, que no aflojaba, sabiendo que tenía que mantener la concentración para intentar evitar que se le vaya el partido al tercero. La ansiada rotura iba a llegar en el séptimo juego, donde Tomás se colocaría 4-3 para tomar definitivamente el control sobre el resultado. El neerlandés seguía incómodo e incluso tendría que salvar unos primeros match points en contra para continuar luchando, algo que le daría rédito en el juego siguiente, recuperando la paridad.
Llegando al 6-6 sin definición, aparecía el inexorable tiebreak para definir este segundo set, muy importante para las esperanzas del argentino, que seguramente llegaría diezmado moralmente a un hipotético tercero. Finalmente, Etcheverry logró estampar ese 7-4 en el desempate decisivo para tomar alivio y sellar su pase de ronda en Canadá.