El tenista argentino Sebastián Báez derrotó al español Albert Ramos Viñolas por 6-4, 4-6, 6-2 tras 2h30m de juego por las semifinales del ATP 250 de Santiago. El número 78 del mundo buscará su primer título ante Alejandro Tabilo o Pedro Martínez.
Sebastián Báez empezó su año en Oceanía jugando los primeros ATP del año. Allí, pasó la qualy de Melbourne, aunque Rusuuvuori lo superó en primera ronda. Seguidamente, superó la clasificación de Sydney, venció O’Connell en primer ronda y Sonego le mostró la salida en octavos. Finalmente, completó una magnifica actuación en Australian Open: tras vencer a Ramos Viñolas en una batalla a cinco sets, sorprendió con su nivel a Tsitsipas, aunque no le alcanzó para triunfar. Una semana después, encaró la gira sudamericana de ATP. Comenzó en Córdoba llegando cuartos de final, aunque Tabilo lo despidió. En Buenos Aires, nuevamente, Sonego lo sacó en segunda ronda. Antes de llegar a Chile, pasó la qualy de Río y Monteiro lo venció en tres sets. En Santiago está con un nivel altísimo y ya superó a Varillas, Londero y Monteiro.
Albert Ramos Viñolas es de los tenistas españoles más complicados en canchas lentas, ya que no le molesta pasar muchas horas en la cancha. El ibérico ya cuenta en su palmarés con tres ATP 250 y siete títulos a nivel Challenger. Tras un 2021 que le dejó la alegría de alzar el trofeo en Estoríl, el español buscará en esta temporada volver a meterse en el Top 20, lugar que tocó en 2017. Luego de haber caído en Australian Open en una dura batalla ante Báez, el número 44° del ranking viajó hacia Argentina para coronarse en el ATP de Córdoba. Luego, con mucho cansancio jugó en Buenos Aires, pero sin éxito. En Río de Janeiro su compatriota Andújar lo venció en una gran batalla. En Santiago, superó con mucha jerarquía a Taberner y Bagnis para citarse en semifinales.
Báez impone condiciones ante Ramos
Partido muy igualado entre ambos, con largos rallies desde el fondo de la cancha, y bastantes idas y vueltas en los juegos, con puntos de quiebre y todo. Báez sacó la primera diferencia para ponerse 4-2 arriba, pero inmediatamente sería recuperado por Ramos. Todo parecía desembocar en un tiebreak, hasta que Seba volvió a concretar un quiebre para llevarse el set por 6-4.
Un panorama bastante similar en el segundo set, con un Ramos algo más cauteloso, sabiendo lo que perdía en caso de que Báez marque diferencias en el marcador. El catalán esta vez fue quien desequilibró el resultado con un break en el quinto juego, para tomar la delantera con un 3-2. Esa ventaja sería definitoria para que Albert gane la manga por 6-4.
A pesar del golpe por haber perdido el segundo set, Báez salió enchufado al tercer, logrando un quiebre inicial para apretar el puño y llevarse una ventaja de 3-0 en lo numérico. El argentino empezó a sentirse muy cómodo en sus turnos de saque, sin volver a entregar siquiera una chance de quiebre. Finalmente, Sebastián selló el triunfo con un 6-2 para jugar su primera final ATP.