La kazaja ha dado un golpe de autoridad en el debut del WTA 1000 de Pekín. Rybakina ha sido muy superior a Qinwen Zheng que jugaba en casa y llegaba de ser campeona en los Juegos Asiáticos.
Esperado era el primer duelo en Pekín de una Elena Rybakina que había tenido alguna que otra polémica con la WTA en las últimas semanas. La kazaja llegaba sin jugar desde el US Open por la exigencia del calendario femenino. Esta vez se enfrentaba en el debut del WTA 1000 de Pekín ante la ídola local Qinwen Zheng, que venía de ser medalla de oro en los Juegos Olímpicos y de asegurar su plaza en los Juegos Olímpicos de París 2024, que se disputarán el próximo año. En el cara a cara un precedente y ganó Rybakina por la vía rápida en Wimbledon, aunque esta vez se esperaba un duelo más parejo.
Rybakina y un primer triunfo por la vía rápida
Rybakina comenzó muy acertada y agresiva. En la pista se veía a una jugadora con una marcha más que su rival. Qinwen Zheng salió algo fría y también se le notaron los nervios de jugar en casa, siempre una presión añadida. De repente el marcador estaba 5-0 a favor de Elena. Únicamente su rival pudo maquillar el marcador y poner el 1-5, aunque sin mayores problemas Elena Rybakina por 6-1 se llevaba la primera manga en solamente 25 minutos.
Las buenas noticias para el público es que Qinwen Zheng comenzaba mandando en el segundo parcial. Eso sí, pronto se nubló todo y es que otra vez Rybakina era la que imponía su juego a base de golpes poderosos y winners. Zheng además estaba errática y se le veía poco animada. Su rival se marchaba hasta el 5-1 y estaba a las puertas del triunfo. Ganando el octavo juego en blanco por 6-2 eliminaba a Qinwen Zheng después de un mal partido de la china y avanzaba hasta la segunda ronda. Rybakina empieza pisando fuerte en Pekín.