Alexander Zverev logró en la final del año pasado en Halle un punto que quedará en la historia del torneo. El joven alemán consiguió uno de los mejores willys nunca vistos sobre la hierba en la final del torneo. En frente estaba su compatriota Florian Mayer, cuya experiencia le valió para levantar el título de 2016.
El torneo de Halle es el que mayor prestigio tiene en todo el país alemán de los que se disputan en hierba. Los jugadores locales son unos especialistas en este tipo de superficies, tras la gran tradición que existe en el país bávaro sobre el césped. La final del año pasado enfrentó al jovencísimo Alexander Zverev, frente al veterano Florian Mayer. Un gran duelo que hizo vibrar a los aficionados con algunos puntos que quedarán para el recuerdo. Tenemos que destacar un passing shot que consiguió la promesa del tenis germano, que posiblemente sea uno de los mejores golpes entre las piernas que se han visto en la última década del tenis mundial. Tras un buen globo de Mayer, su contrincante corrió hacia la línea de fondo, con tranquilidad cambio la empuñadura y consiguió un willy paralelo incontestable. El público y el mismísimo tenista se dignaron a aplaudir el mejor punto del año 2016.
