El tenista austríaco Dominic Thiem superó al argentino Facundo Bagnis por 6-4, 7-5 tras 2h04m de juego en la primera ronda del ATP 250 de Umag. De esta manera, el No. 112 del mundo se enfrentará con el checo Jiri Lehecka en la segunda rueda.
Dominic Thiem pasó del cielo al infierno en su carrera profesional, según declaró él hace algunas semanas. El austríaco formaba parte de un selecto grupo de los mejores tenistas del mundo, pero una serie de lesiones lo retrasaron en el ranking perdió muchísimo terreno. Regresar a su mejor versión le ha costado muchísimo, aunque lo sigue intentando. En esta temporada llegó a semifinales de Mauthausen y a cuartos en Estoril y Munich, como lo más destacado. En frente llegaba Facundo Bagnis, que venía de superar la clasificación. El nacido en Amstrong tocó su mejor ranking en 2015, No. 55, y luego de varios años regresó a estar entre los mejores del mundo. En una temporada complicada, en la que no logró alcanzas instancias definitivas, sólo se destacó en cuartos de final de los Challengers de Santiago y Mauthausen.
Thiem lo cierra a tiempo
Dominic Thiem y Facundo Bagnis se enfrentaban en la primera ronda del ATP de Umag.
El arranque del encuentro fue dominado en lo absoluto por parte del austríaco, que rápidamente presionó a su rival para generarle break points y lastimarlo con su profunda devolución. Al game siguiente, el argentino reaccionó de gran manera, adelantándose en cancha y dañando mucho con su derecha cruzada, pero no logró capitalizar su chance de recupero. Posteriormente, ambos fueron sosteniendo sin ceder terreno. Esta dinámica le favoreció Dominic, que con mucho oficio mantenía la ventaja. Con un gran temple para cerrar, Thiem se adelantó por 6-4 en 54 minutos.
Con menos tensión y mayor soltura, el argentino de Amstrong elevó su intensidad y tomó riesgos para sostener en 0. Luego crear chances, aunque nuevamente le costó tomarlas. Una de las grandes diferencias que tuvo el encuentro fue esa: el austríaco capitalizó los break points, mientras que Facundo no lo logró. Tras un periodo en el que los dos imponían su servicio, en el décimo juego desde la devolución Bagnis generó dos set points, y una vez más no pudo sellarlo. Thiem tomó coraje, presionó con su revés a una mano, y aunque su rival parecía remontarlo, lo cerró por 6-4, 7-5 tras 2h04m.