Iga Swiatek sacó adelante un exigente compromiso en los octavos de final del WTA 1000 Wuhan. La polaca respondió con puño de hierro ante las demandas de Belinda Bencic y se instaló en los cuartos de final.
Swiatek pasa la prueba de Bencic en Wuhan
Iga Swiatek (2°) y Belinda Bencic (15°) protagonizaban un atractivo duelo de octavos de final en el Wuhan Open. La polaca, segunda cabeza de serie y reciente campeona en Seúl, debutó con un contundente doble 6-1 ante Marie Bouzkova, confirmando su buen rendimiento en la gira asiática. Bencic, por su parte, arrasó con Donna Vekic en su estreno y avanzó de ronda tras el retiro de Elise Mertens. Con el historial favorable y un presente sólido, Swiatek buscaba mantener su dominio ante la suiza, a quien derrotó con autoridad en las semifinales de Wimbledon, en un encuentro que prometía intensidad y contraste de estilos.
La polaca se luce en el desempate
El primer set comenzó con un dominio absoluto de Swiatek, quien no cedió un solo punto con su servicio y concretó un quiebre temprano para tomar ventaja. Segura desde el fondo y precisa en la devolución, la polaca se adelantó 3-0 en el marcador. No obstante, Bencic reaccionó con temple: ajustó sus golpes y recuperó el quiebre en el quinto juego, equilibrando las acciones. Ambas comenzaron a soltarse y el nivel de exigencia creció en cada intercambio. En el tramo final, la suiza logró otro break clave, pero Swiatek respondió de inmediato y forzó el tiebreak, donde impuso su jerarquía y mayor consistencia para cerrar el primer parcial a su favor.
Swiatek aprovecha la ventaja y sella la victoria
La segunda manga se desarrolló con mayor paridad en los primeros compases, aunque Bencic fue la primera en golpear con un quiebre en el segundo game. Lejos de perder el control, Swiatek reaccionó de inmediato con una devolución impecable y un juego en blanco para recuperar la igualdad. A partir de allí, la polaca mostró un tenis más suelto y dominante, imponiendo ritmo y precisión en cada intercambio. Su consistencia comenzó a inclinar la balanza, y en el séptimo juego logró un nuevo quiebre que resultó determinante. En el desenlace, Bencic no encontró respuestas ante la solidez de la número dos del mundo, que selló el triunfo con un 6-4 para avanzar a los cuartos de final.