Stricker venció a Zeppieri en dos sets para hacerse con el título en Rovereto (7-6(8), 6-2).
Rovereto acogía bajo el techo de su pista indoor la final del primer torneo Challenger de su historia, y lo hacía con dos jugadores zurdos aunque con estilo bien diferenciador de juego. Zeppieri y Stricker llegaban a la final del certamen italiano con la idea de buscar un nuevo título para su palmarés. Ambos tenistas medían fuerzas por primera vez en la gran final del torneo en un duelo inédito hasta ahora en el circuito profesional a nivel Challenger.
Stricker sale victorioso
Tanto Zeppieri como Stricker llegaban dejando muy buenas sensaciones previas, en un duelo que se presuponía bonito y emocionante. El tenista italiano contaba con el apoyo de su gente, y no tardó en hacerse con las riendas del partido gracias a un tempranero break que le permitió ponerse con ventaja a costa de un irregular Stricker que no se sentía nada cómodo con su juego profundo y directo. Todo hacía presagiar que el jugador local se llevaría el primer set, pero un mal juego al saque le permitió a Stricker reengancharse a la pelea y forzar el tie-break y ahí el helvético se aprovechó de las dudas de su rival para llevarse el primer set.
Stricker no tardó en aprovechar su buena inercia del primer parcial para sacar a relucir su arsenal ofensivo que le permitió lograr un break de ventaja al poco de comenzar. El tenis agresivo del jugador suizo hizo mella en un Zeppieri que no lograba frenar el buen hacer de Stricker al otro lado de la red, y los juegos fueron pasando con ambos tenistas manteniendo sus servicios de forma clara. Finalmente Stricker afianzó su victoria con una rotura en el último juego del encuentro que le permitió cerrar el partido por todo lo alto y de esta forma sumar un nuevo título Challenger que certifica su buen momento de forma en este año 2023.
