El tenista ruso consigue una épica victoria. Andrey Rublev firma una gran remontada en los octavos de Doha para apear a Tallon Griekspoor.
El primer cabeza de serie del ATP 250 de Doha saltaba a pista para comenzar su conquista del título ante un jugador que ha evolucionado mucho. Andrey Rublev llega ubicado en el puesto cinco del ranking tras conseguir hacer cuartos en Australia, aunque en torneos ATP ha demostrado menor rendimiento. Tallon Griekspoor llega ubicado en el puesto número 40 y tras derrotar a Halys en un duro partido de primera ronda. El cara a cara personal entre ambos se estrenaba con este encuentro en el que el ruso parte como favorito.
Inicio arrollador de Griekspoor
El partido comenzó con ambos jugadores manteniendo el servicio a cero, sin sobresaltos y sin dar opciones al rival. Tallon comenzó más activo que el ruso y gracias a eso se hizo con una rotura tras volver a ganar su servicio de manera cómoda. Griekspoor campaba a sus anchas por la pista ante un Rublev que no encontraba soluciones. Con el 4-1 el holandés volvió a ponerse 0-40 para romper de nuevo y aprovechó la segunda bola para ponerse 5-1. Tras ganar su servicio saltaba la sorpresa en Doha.
Rublev retoma el mando
Al igual que su máximo rival en el torneo Andrey Rublev comenzó perdiendo el primer set y saltando las alarmas. El ruso le tomó el pulso al encuentro y tras ponerse 2-1 consiguió una rotura vital. Andrey comenzó a encontrarse más cómodo en pista y fue tomando el pulso con su potencia. Rublev comenzó a imponer su derecha y en el 4-1 el holandés pidió tiempo médico. Finalmente, Rublev cogió las riendas del parcial para empatar el partido y mandarlo al set decisivo.
Griekspoor incendia el partido
Las espadas estaban por todo lo alto y ambos jugadores dominaron un set cada uno. En el tercero, el holandés rompió el servicio del ruso y se marchó al tres cero. Tallon estaba jugando a gran nivel y dominaba con su derecha ante un Rublev que trataba de reaccionar. En el 4-2 aparecieron dos bolas de rotura para Andrey, que no consiguió capitalizar y siguió esperando su oportunidad. Llegó en el último juego y el ruso evitó la catástrofe y rompió para mantenerse con vida. Tras ganar el tie break el ruso ganó un partido de infarto.
