Lourdes Carlé tuvo demasiados problemas para validar los quiebres en el partido contra la española Párrizas en la segunda ronda del WTA 125 de Bastad. La jugadora argentina resistió lo más que pudo, pero terminó cayendo en el tercer parcial.
Carlé cae en su presentación en Bastad
La argentina María Lourdes Carlé (87°) y la española Nuria Párrizas-Díaz (165°) se veían las caras en los octavos de final del WTA 125 de Bastad. Estas dos tenistas aterrizaban en Suecia después de su corta estadía en Wimbledon. Por su lado, Carlé venció con amplia diferencia a la española Masarova en la primera ronda con un score de 6-1, 6-2. En contraparte, Párrizas hizo lo propio ante otra argentina, Julia Riera, ganándole con parciales de 6-3 y 6-1. Ambas jugadoras se destacan en las canchas de tierra batida, donde consiguen desplegar un tenis más consistente. Se enfrentaron una sola vez en la Qualy de Indian Wells, allí la española se llevó la victoria en sets corridos.
Párrizas ganó el duelo de quiebres
El primer set de este encuentro estuvo repleto de rupturas, donde parecía que las tenistas se sentían más cómodas a la hora de devolver. Párrizas fue quien empezó quebrando el juego, la española concretó la primera chance de break en el segundo game. Acto seguido, Carlé tomó las riendas del duelo desde el retorno para recuperar el servicio perdido. Aún así, la argentina no pudo igualar los dígitos, su rival le hizo trabajar algunos puntos adicionales y luego le arrebató el saque. Cada juego venía acompañado de puntos extras, se trataba de un partido demasiado cerrado. Carlé seguía prendida en los números, concretó un nuevo quiebre para descontar, pero no conseguía validarlo, la española se lo negaba. Las rupturas continuaron, a pesar de mostrar debilidades con el servicio, Párrizas pudo cerrar el parcial por 6-4.
Carlé se mantuvo fuerte en el desempate
En la segunda manga las tenistas calibraron los saques, tuvieron mejores porcentajes de servicios, sin recibir daño en los primeros juegos. Hasta el sexto game no se ocasionaron quiebres, las dos participantes pudieron acomodarse en el terreno. Después de varios intercambios de golpes y de puntos, la argentina presionó a su rival fabricando chances de quiebre, terminó concretando la diferencia. Al igual que en el primer set, Párrizas no permitió que su oponente ratifique la ventaja, desenvolvió una buena defensa y recuperó el break. Carlé volvió a fracturar el saque de la española, sacó para ganar el parcial, pero se topó con otra gran respuesta de Párrizas. La paridad se mantuvo hasta el desempate, donde Lourdes pudo estabilizar su tenis para contrarrestar el juego de su rival y se apropió de la segunda manga.
La española le puso fin al camino de Lourdes
En el parcial decisivo también se produjeron múltiples fracturas, era evidente que las jugadoras se sentían presionadas en el momento de servir la pelota. Carlé contuvo el servicio en el juego principal y desde allí se quebraron cada uno de los turnos de saque hasta el octavo game. Las tenistas lograban poner en acción la pelota, aunque no sabían cómo manifestar su tenis, realmente se desenvolvían mejor como receptoras. Luego de seis quiebres consecutivos, Párrizas consiguió sostener el servicio, sumando confianza para los siguientes juegos. Así fue, la española fortaleció su tenis, logró penetrar la defensa de Carlé y quebró una vez más en el undécimo game. Finalmente, después de tantos altibajos en el encuentro, Párrizas mantuvo el saque más importante para quedarse con el triunfo tras un 7-5 final.
