La tenista japonesa Naomi Osaka superó a la israelí Lina Glushko en la primera ronda del WTA 250 de Auckland. De esta forma, avanzó a los octavos de final y se enfrentará con Leyre Romero o Julia Grabher.
Osaka le pone puntapié inicial a su temporada en Auckland
Naomi Osaka ha lidiado con varios asuntos personales y lesiones en sus últimas temporadas, los que la mantuvo durante varios meses fuera de competencia. No obstante ello, la japonesa tomó fuerza, se mantuvo en un gran estado físico y tenístico, y luego de algunas buenas apariciones en 2024, este 2025 quiere regresar a su mejor versión. Lo más resonante de su año pasado fue los cuartos de final en Doha y Hertogenbosch. En Auckland le da comienzo a un nuevo año en su carrera y chocaba con la israelí Lina Glushko en la primera ronda.
La japonesa golpea de entrada para liderar
Naomi Osaka y Lina Glushko se enfrentaban en la primera ronda del WTA 250 de Auckland.
El arranque del partido fue muy bueno de las dos, sosteniendo el saque y no cediendo espacios en la pista para no sufrir presiones. Inmediatamente, Naomi soltó la devolución con profundidad, incomodó con excelentes aperturas y rompió el servicio en su primera oportunidad para colocarse arriba. A partir del cuarto game, el encuentro se dio de una forma muy cerrada, con puntos rápidos y poca disputa en el medio. Glushko fue sosteniendo tratando de mantenerse con vida en la manga, si bien debió pedir un minuto médico. No obstante, Osaka no bajó su intensidad y se lo llevó por 6-4 en 40 minutos.
Osaka destraba el set para cerrar la victoria
Presionando desde la recepción y tomando buenas decisiones con su derecha, la nipona presionó en el comienzo de la segunda manga, pero Lina mostró su templanza para escapar sin problemas. Tras sostener en cero con buenos primeros saques, la ex No. 1 del mundo se lanzó al ataque y aprovechando errores rompió el servicio. Pero la israelí no sintió ningún golpe anímico, mantuvo su postura en la pista y recuperó velozmente. Escapando de dos break points se colocó arriba en el score y sembraba la duda. Pero a partir del octavo game Glushko sintió los nervios, Osaka apretó con su derecha y sentenció el 6-4, 6-4 tras 1h21m.
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