El balear da el primer paso en Wimbledon. Munar jugó sólido y agresivo para imponerse a una de las sensaciones de la gira de hierba, Billy Harris, un jugador local (6-4, 6-4, 3-6, 6-3).
Gran inicio de Munar en Wimbledon
Jaume Munar debutaba con mucha ilusión en Wimbledon. El tenista mallorquín no tenía un duelo sencillo y es que se medía ante el local Billy Harris, un jugador que había rendido por encima de lo esperado en esta gira de hierba. La solidez de Munar iba a intentar frenar la gran adaptación de su contrincante a esta superficie. Un duelo complicado para Jaume, pero que iba a afrontar sin esa presión de ser favorito. El ganador iba a ser rival del australiano Duckworth o De Miñaur.
Munar empieza sólido
Harris comenzó llevando la iniciativa en el marcador. El británico se sentía cómodo con su servicio y esas subidas constantes a la red para cerrar los puntos. En cambio la solidez y la pelea de Munar le dieron un break en el séptimo juego tras los errores de su rival que tras confirmarlo le mandaba hasta el 5-3. El español sorprendía y se llevaba la primera manga por 6-4 mostrándose muy concentrado durante todo el primer parcial.
Llega la lluvia
La lluvia amenazaba con parar el encuentro. Justo tras el 3-3 llegaba esa lluvia que hacía parar los encuentros. Tras la reanudación Munar quebró y tras confirmar el break se ponía con el 5-3 más cerca de la segunda manga. Con su servicio cerraba el parcial y por 6-4 se quedaba muy cerca de la primera victoria en Wimbledon 2024.
Harris sueña
Billy Harris continuaba con muchos problemas con el servicio y es que Munar estaba muy sólido y siendo más agresivo que en otras ocasiones con su tenis. El problema es que el británico salvaba las siete bolas de break en contra con mucha personalidad. Además aprovechó su oportunidad para por 6-3 forzar el cuarto set.
Munar avanza a segunda ronda
Todo fue un reflejo y es que a Jaume Munar no se le encogió el brazo. El español salió muy concentrado y con ganas de finiquitar el duelo en el cuarto set. Rápidamente se escapaba hasta el 3-0. Es cierto que en los momentos finales se le volvía a encoger el brazo y tuvo que sufrir pero por fin a la cuarta bola de partido cerraba el puño y celebraba su pase a la siguiente ronda.
