Daniil Medvedev se siente cómodo en el césped británico y sigue sumando triunfos, en esta oportunidad se quitó del sendero al alemán Struff en la tercera ronda de Wimbledon. Con esta victoria, el moscovita tendrá la prueba más difícil en la siguiente fase, jugará ante Grigor Dimitrov.
Medvedev supera un duro escollo en Londres
El ruso Daniil Medvedev (5°) tenía una cita complicada ante el alemán Jan-Lennard Struff (41°) en la tercera fase del tercer Grand Slam del año. El tenista moscovita venía de sufrir algunos inconvenientes en el partido anterior, donde venció al francés Muller en cuatro parciales. A su vez, Struff mostró lo mejor de su tenis para oponerse al chino Zhang en la segunda ronda. El ruso y el alemán se medían por un asiento en los octavos de final de Wimbledon, ya se habían enfrentado en seis ocasiones, Struff pudo vencerlo una sola vez.
Daniil levantó una pared en el fondo
El tenista moscovita se plantó en la línea final con el fin de contener los potentes servicios del alemán, tratando de ganar los puntos a partir de la segunda pelota. Más allá de que Struff no estuvo fino con el saque como en otros partidos, Medvedev realizó una gran tarea con la devolución. Desde el segundo juego, donde Daniil se apropió del primer quiebre, el duelo fue dominado por el ruso. Medvedev fue muy efectivo en el fondo de la cancha, sus retornos generaban incomodidad en el alemán, quien volvió a ceder el servicio en el cuarto game. Con los números totalmente dispersos, el moscovita mantuvo el nivel de su juego para ganar el primer set por 6-1.
Otra gran performance del ruso
En la segunda manga, Struff mejoró considerablemente el servicio, pero le costaba imponer su tenis en los intercambios de golpes. Por su parte, Medvedev seguía trayéndole problemas a su oponente, el ruso no tenía pensado bajar el ritmo. Daniil manifestó su buen desempeño en los primeros juegos del set, sumando múltiples ocasiones de quiebre, aunque no las podía cerrar. En cambio, ante la formidable defensa que propuso el moscovita, Struff no encontró espacios para generar sus propias posibilidades. En el séptimo game, Medvedev ratificó su precisión en el partido concretando un nuevo break. Posteriormente, el ruso repitió la dosis contra el alemán, fracturó otra vez su saque y selló los dígitos del segundo parcial con un 6-3.
Struff descifró las claves y se metió en el partido
Jan-Lennard no estaba dispuesto a irse tan rápido de la contienda, aún le quedaban algunas armas para desatar en contra de Medvedev. Durante de los primeros juegos del tercer parcial no hubo sorpresas, ambos jugadores sostuvieron los servicios y no marcaron ninguna diferencia. El tenista alemán empezaba a mostrar cierta mejora en su tenis, plasmándolo en el séptimo game, donde logró romper el saque del ruso. A pesar de que Daniil reaccionó en el siguiente juego quebrando nuevamente, Struff no bajó la intensidad de sus ejecuciones. Al final, el alemán pudo romper el muro que fabricó su oponente, logró imponer la velocidad de sus tiros y se adjudicó la tercera manga por 6-4.
Medvedev halla las claves en el desempate
Luego de una gran recuperación en el tercer parcial, Struff catapultó su potencia al siguiente set y aumentó la eficiencia de su servicio. La balanza del juego se equilibró, tanto el ruso como el alemán se hicieron fuertes con el saque, por lo que no se generaron chances de quiebre. Medvedev se vio obligado a dar unos pasos hacia atrás para contener la velocidad que impuso su oponente. Por su lado, Struff tenía que controlar sus golpes para fabricar espacios y así poder atacar al ruso. Sin detalles extras, saque contra saque, los participantes lograron desatar su mejor tenis para resolver los números en el tiebreak. Allí, en el desempate, Medvedev jugó con inteligencia, desenfundó tiros efectivos y, con un gran passing paralelo, consiguió el pase a los octavos de final.
